Navidad de la Virgen con el Niño
Duerme, mi Niño, que a salvarnos vienes,
duerme en los tiernos brazos de María,
Santa Madre de Dios, Flor de alegría,
Virgen y Reina de mis parabienes.
Anda el mundo metido en sus belenes
tan suyo y tan vacío de armonía,
que no logra de noche ni de día
comprender esa gloria que tú tienes.
Ángel del Gran Consejo y Luz del Cielo,
que te abajas de carne revestido
para auparnos al aire de tu vuelo.
Llegue clara a los hombres tu verdad,
de suerte que, atisbando su sentido,
vivan rendidos a la Navidad.
Pedro Langa Aguilar, OSA
Navidad 2018
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