Todos juntos
Un espacio propuesto por EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO

viernes, 30 de abril de 2021

LOS PENSAMIENTOS DE KOLDO


SERVIR ABAJO MIRAR ARRIBA

por Koldo Aldai

El ruido de lo banal se vuelve particularmente estridente en nuestros días. Los políticos aumentan sus decibelios con tal de ganar el trono de Madrid. El mundo del balón se inventa otra liga para que no quede un resquicio de nuestras vidas sin fútbol... Cada vez estamos más necesitados de exilio hacia los remansos de paz que somos llamados a crear. Hoy más que nunca necesitamos el bálsamo de las Grandes Almas y su mensaje de vida eterna.

Fueron agotadoras, pero ya añoro esas alturas, esas soledades. Vuelvo al mundo después de seis días peregrinando por la montaña. Atesoro dentro un silencio, una paz que se esfumará a nada que pulse el “play” de la tele o abra los periódicos digitales; a nada que me quiera poner de nuevo “al día”, pero es arriba, en medio de esa imponente soledad, donde estaba al día, consciente, despierto, sobre todo inmensamente agradecido.

Servir abajo y mirar Arriba. Permanecemos en este mundo, pero no queremos ser de él, queremos ser de ese otro en el que los números y los algoritmos sirven a la vida y no al miedo, en el nunca callan las cascadas cristalinas, en el que la naturaleza nos rodea en todo su esplendor. Anhelamos un mundo en el que nadie se pelee por gobernar, en el que volvemos a respirar paz y mutua comprensión, a vivir por fin como hermanos.

FUENTE:
Koldo Aldai






jueves, 29 de abril de 2021

IGLESIAS PROMOTORAS DE SALUD

El Consejo Mundial de Iglesias ha creado un manual único en su tipo para ayudar a las iglesias de todo el mundo a promover la buena salud en sus comunidades y más allá.


El Consejo Mundial de Iglesias publica un manual único en su tipo para ayudar a las iglesias a promover la buena salud

El "Volumen II de iglesias promotoras de la salud: un manual para acompañar a las iglesias en el establecimiento y el funcionamiento de ministerios de promoción de la salud sostenibles", editado por el Dr. Mwai Makoka, ejecutivo del programa del Consejo Mundial de Iglesias para la salud y la curación, traza una visión para que las congregaciones locales actúen como agentes para la cura .

“En el corazón de esta publicación se encuentra un llamado a la confraternidad, ya cada individuo, a contribuir con sus dones únicos para mantener la salud de sus seres queridos, sus comunidades y sus hermanas y hermanos en todo el mundo”, dijo Makoka. "Esperamos que esto nos ayude a todos a volver a imaginar juntos un mundo mejor después de COVID".

El manual incluye pautas, recursos y herramientas para equipar y apoyar a las congregaciones cristianas locales en el inicio de ministerios de salud sostenibles, así como una base teológica y de salud pública para iglesias promotoras de la salud.

Se proporcionan planes de trabajo en siete áreas de intervención: dieta, ejercicio físico, tabaco, alcohol, salud mental, tuberculosis y COVID-19. También se proporciona un marco de seguimiento y evaluación y orientación sobre cómo abordar otros problemas de salud emergentes.

El manual también guía a las iglesias locales hacia oportunidades para fortalecer los esfuerzos existentes en el ministerio de salud de una manera coherente y basada en evidencia.

Iglesias promotoras de la salud Volumen II:

Un manual para acompañar a las iglesias en el establecimiento y funcionamiento de ministerios de promoción de la salud sostenibles.

2021

Editado por: Dr. Mwai Makoka

Basado en la premisa de que la congregación local es el agente principal para la curación, y cada miembro individual tiene un don único para contribuir a este ministerio de curación, este libro proporciona pautas, recursos y herramientas para equipar y apoyar a las congregaciones cristianas locales en el inicio de una salud sostenible. ministerio.

Proporciona una base teológica y de salud pública del modelo de iglesias promotoras de la salud (HPC) y una guía para organizar el programa HPC de manera sostenible.

Especificaciones: 118 páginas; A5; PDF; Cubierta de 4 colores
ISBN: 978-2-8254-1754-6
Estanterías / Temas: Religión /
Derechos de salud : Mundo, todos los idiomas

DESCARGAR EDICIÓN INGLESA:



Un marco para un ministerio de salud sostenible

Se proporcionan planes de trabajo en siete áreas de intervención: dieta, ejercicio físico, tabaco, alcohol, salud mental, tuberculosis, COVID-19 y otros temas de salud. También se proporciona un marco de seguimiento y evaluación y orientación sobre cómo abordar otros problemas de salud emergentes.

Sobre la base de la participación temprana del Consejo Mundial de Iglesias en el movimiento de Atención Primaria de la Salud y el apoyo al enfoque de entornos saludables de la Organización Mundial de la Salud, el programa de iglesias promotoras de la salud del Consejo Mundial de Iglesias es una oportunidad para fortalecer los esfuerzos existentes en el ministerio de salud en las iglesias de una manera coherente y basada en evidencias. .

Un ministerio de salud sostenible garantizará que:

• La iglesia es un lugar de educación para la salud. El conocimiento es poder, y la iglesia es un espacio seguro y eficaz para brindar educación de salud crítica desde perspectivas médicas, sociales y bíblicas y abordar los mitos y la desinformación.

• La iglesia es un lugar de acción práctica. Este manual ayudará a las iglesias a administrar un ministerio de salud basado en el cuidado amoroso mutuo y la responsabilidad para que los cristianos puedan tomar acciones concretas juntos hacia estilos de vida saludables como individuos, familias y comunidades.

• La iglesia es un lugar para la defensa y el cuidado de la creación. La teología de la salud y la curación llama a la iglesia a actuar más allá de las preocupaciones de salud individual y familiar y traer la curación.

ministerio en los ámbitos político, social, ambiental y económico. Este manual proporciona una guía para que las iglesias identifiquen, analicen y aborden estas políticas, sistemas y problemas ambientales.

• La iglesia es un lugar de empoderamiento para el testimonio público. Todo cristiano está llamado a ser sal y luz para el mundo. La iglesia es un lugar donde los cristianos individuales tienen el poder de ser esa sal y luz en sus áreas de influencia. Los cristianos, en cualquier capacidad personal u oficial, están llamados a tomar decisiones que promuevan la vida y testifiquen del señorío de Cristo sobre toda la creación.

Reconocimientos:

Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus
Director General, Organización Mundial de la Salud
La OMS apoya plenamente al Consejo Mundial de Iglesias en este esfuerzo de promover la salud y prevenir las enfermedades a través de iglesias de todo el mundo.

Patriarca ecuménico Bartolomé
Este valioso manual da testimonio de una comprensión holística de la curación y la salud, proporcionando una poderosa herramienta para que las iglesias se unan para ofrecer un ministerio de curación común eficaz al mundo.

El profesor John Wyatt, presidente, Christian Medical Fellowship, Reino Unido;
Profesor emérito de Pediatría Neonatal, University College London
Apoyo firmemente este recurso excelente, innovador y altamente práctico que proporciona una hoja de ruta para permitir que las iglesias se conviertan en comunidades sanadoras y sanadoras eficaces y transformadoras, en las realidades del siglo XXI.

Reverendísimo Dr. Thabo Makgoba, Arzobispo de Ciudad del Cabo
"La salud fue fundamental para el ministerio de nuestro Señor, y el ministerio de curación de la Iglesia es un bálsamo para nuestras heridas profundas. Léelo y serás curado por el viaje que el Dr. Makoka nos pide que emprendamos".


DESCARGAR IGLESIAS PROMOTORAS DE SALUD
VOLUMEN I
En Español


FUENTE:
https://www.oikoumene.org/






miércoles, 28 de abril de 2021

BOLETÍN CEC-MASVIDAL MARZO-ABRIL 2021


Nuestros hermanos de la Comunidad Ecuménica Cristiana Jaume Masvidal, nos envían su Boletín CEC-MASVIDAL nº 37/ 042021 correspondiente a marzo-abril 2021


Noticias

Nuevo Catecismo de la Reforma:

Ya tenéis a vuestra disposición el "Catecismo de la Iglesia de Ginebra", el segundo título de la colección "Catecismes de la Reforma". Fue escrito por J. Calvino en 1547 y consta de 373 puntos en donde el reformador repasa toda la doctrina cristiana, en formato de diálogo entre un maestro y un discípulo. 

Misiones en Marruecos:

El Equipo cristiano con el cual la CEC-Masvidal colabora sobre el terreno en Marruecos, ya dispone del importe total solicitado para iniciar la construcción del pozo de agua potable en Xij Lemerug. Este mes ha comenzado el Ramadán y esto hará que el inicio de las obras se retrase un poco. Os pasamos el enlace al audio de agradecimiento de la responsable del equipo en Fez:



Edición del segundo semestre de El Cenacle:

Recordad que la edición en papel del devocional "El Cenacle" ahora es semestral: aprovechad para empezar el segundo semestre del año con él en las manos y tener una herramienta de bendición espiritual diaria.



Evangelización infantil:

Como sabéis, estamos apoyando a una escuela dominical de la Ciudad de Bata, en Guinea Ecuatorial, con el envío de recursos formativos y de material catequético. Os queremos pedir que en estos días oréis especialmente por este ministerio, porque su éxito hace que la responsable reciba presiones del entorno desde ámbitos ajenos al mundo de la iglesia. Confiamos en el poder de Dios para cuidar de su obra; es por eso que os pedimos vuestras oraciones. Esta foto es del día 6 este mes de abril.

Renovación de cargos en la CEC-Masvidal:

Os informamos que el pasado día 27 de febrero, la CEC-Masvidal celebró su Asamblea General Ordinaria anual, que incluyó la renovación bianual de cargos de la junta. La que hasta ahora ha sido nuestra presidenta, Alicia Pallàs, renunció a la reelección por cuestiones de carácter familiar. La CEC-Masvidal agradece muchísimo su contribución desde la fundación de la entidad y hasta la fecha, en espera de que se reincorpore nuevamente al equipo directivo en un futuro próximo. 

Los cargos quedan así:
  • Presidente: Enric Ainsa, antiguo tesorero
  • Secretaria: Aurembiaix Ainsa, (reelegida)
  • Tesorera: Erika Aguerri.

FELICES POR SIEMPRE

Suspiré cuando leí otra meditación donde una vida estaba en riesgo: la gente rogó y la vida se restauró milagrosamente. Por supuesto, me alegro por ellos, pero me pregunté: ¿dónde están las voces de los que confían en Dios a pesar de las oraciones sin respuesta?

Mi marido y yo oramos por nuestros hijos incluso antes de que nacieran. Los dedicamos a Dios, los llevamos a la iglesia, se les enseñó las Escrituras y nos sacrificamos para que pudieran tener educación cristiana. Nuestra familia sirvió a Dios con alegría. Pero aún así sufrimos.

Nuestro hijo mayor se ahogó cuando era adolescente. Después de diez años de matrimonio, el marido de nuestra hija mayor la dejó. A nuestro hijo pequeño se le diagnosticó esquizofrenia. Han pasado tres años desde que nuestra hija nos hablase por última vez.

La vida es dura. Los seres queridos pueden morir a pesar de nuestra fe y oraciones. Nos podemos divorciar incluso cuando estamos confiados. Las enfermedades pueden ser incurables o mortales. Podemos orar, vivir fielmente y confiar en Dios, pero sin embargo nos enfrentamos a tragedias impensables.

Pero, aun sabiendo esto, podemos seguir orando y viviendo para Dios: creer que Dios es bueno, correcto y amoroso, y que los caminos de Dios son paz. Incluso cuando las cosas van mal, Dios sigue a nuestro lado en la lucha. Y podemos encontrar alegría, sabiendo que nunca estamos solos.

Bueno eres tú, y bienhechor; enséñame tus estatutos."
Salmos 119:68 (RVR1960)

Amado Dios, gracias por tu presencia entre nosotros. Ayúdanos a permanecer fieles a Ti, sin importar nuestras circunstancias.

Sra. De Vonna R. Allison (Florida, EEUE)
"El Cenacle" vol.87.1 – © The Upper Room






martes, 27 de abril de 2021

JUNTOS CELEBRAMOS LA PASCUA

 


VÍA LUCIS
JUNTOS CELEBRAMOS LA PASCUA

Con este lema, "JUNTOS CELEBRAMOS LA PASCUA" diversas confesiones cristianas han celebrado en Zaragoza muchos Encuentros Ecuménicos en Pascua, en los que se reunían para cantar y alabar al Señor. Este año se ha querido retomar dicho encuentro, pero desde una perspectiva diferente como es la contemplación, meditación y oración de diversas escenas de las Sagradas Escrituras. Y así, abrir el corazón para pedir al Padre que nos dé el Espíritu de Dios que ilumine y fortalezca nuestra fe en su resurrección, como lo hizo con los primeros testigos de Cristo Resucitado.

El Vía Lucis tendrá lugar en el Monasterio de la Resurrección (MM. Canonesas del Santo Sepulcro) situado en la calle D. Teobaldo nº 3, de Zaragoza. Será el miércoles día 5 de mayo de 2021, a las 19'30 horas.

Están invitados a este acto todos los cristianos que deseen hacer realidad el que juntos celebremos la pascua. 

VÍA LUCIS
Juntos Celebramos la Pascua
Miércoles 5 mayo 2021
19'30 horas
Monasterio de la Resurrección
ZARAGOZA





lunes, 26 de abril de 2021

UN ALTO EN EL CAMINO: UN PENSAMIENTO

Aquí y ahora

por Ana Bou


Amigos que compartís conmigo este minuto. Ante tanta incertidumbre que vivimos cada día en tantos sentidos, parece que nuestra vida se tambalea. Lo que hoy es blanco, mañana es negro, donde vemos un rayo de luz de pronto aparece un nubarrón…

Buscamos certezas, algo a lo que aferrarnos, que dé sentido y estabilidad a nuestra vida. Sabemos que nuestro tiempo es limitado, no hay una certeza de un mañana. Todo lo que tengo y lo que soy, es el ahora, por eso, creo que es importante saber abrir los ojos cada mañana y no solo abrirlos, sino mirar, aprender a mirar, a escuchar… ¡cuánta gente necesita ser escuchada!, sin embargo, demasiado a menudo esto nos pasa inadvertido porque en nosotros predomina el “yo”. Mis problemas, mi situación, yo, solo yo…

Parémonos, aprendamos a escuchar, no es tan difícil, abramos el corazón a tantos hermanos nuestros que lo necesitan. Tendamos una mano a quien nos la está pidiendo, expresemos nuestra cercanía, nuestro estar ahí. A veces no se necesita más, solo estar, especialmente ahora cuando hay tantos hermanos sufriendo y pasándolo mal. Sé que hay cosas, situaciones, que no están en nuestra mano, quizá ninguna, pero sí “estar”, sin más… Dejemos a un lado nuestros egos, nuestro yo…

Todos conocemos el Evangelio de Mateo 25, ante esto, ¿Qué estoy haciendo yo, cual es mi granito de arena, mi contribución? Demasiadas manos extendidas pidiendo una acogida, un trozo de pan, un poco de nuestro tiempo… para esto no existe un mañana, porque no sabemos si hay un mañana. Se nos está pidiendo ahora.

Es el momento de decidir, de concretar, de afrontar retos y dificultades. Quizá complicadas, pero por lo menos pensar: ¿merece la pena vivir solo para mí y mis circunstancias?

Aprovechemos la oportunidad que nos regala la vida cada día para abrir nuestras manos, acoger, abrazar, llenar nuestro corazón de nombres, de cercanía, de presencia… Estoy segura que si somos capaces de vivir así, nuestra vida tendrá un sentido diferente… intentémoslo…

FUENTE
Ana Bou
UN MINUTO PARA EL ENCUENTRO
https://www.religiondigital.org/un_minuto_para_el_encuentro/





domingo, 25 de abril de 2021

INAUGURACIÓN TEMPLO ORTODOXO RUSO EN ZARAGOZA

Inauguración de la parroquia de San Aleksandr Nevskii y San Jorge del patriarcado de Moscú en Zaragoza


Su eminencia el obispo Néstor Sirotenko, arzobispo de Madrid y Lisboa de la Iglesia Ortodoxa Rusa, del Patriarcado de Moscú y toda Rusia, presidió en la mañana del sábado 24 de abril de 2021, la inauguración del nuevo templo situado en la calle Ricardo del Arco, 29 del barrio zaragozano del Arrabal. Estuvo acompañado por el sacerdote Andrey Kordochkin venido desde Madrid, acompañado por su diácono y por el anfitrión el padre Emilio Alejandro, responsable de la parroquia de San Aleksandr Nevskii y San Jorge de Zaragoza, el acto contó con la participación del coro de la parroquia ortodoxa de Madrid.

Desde el EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO reiteramos la enhorabuena a nuestros hermanos en Cristo de la Iglesia Ortodoxa Rusa de Zaragoza, a su párroco, nuestro apreciado Padre Emilio Alejandro y deseamos que este nuevo templo sea para gloria y alabanza de nuestro Señor y para el bien de toda su Santa Iglesia.


A la celebración asitieron el reverendo Noel A. Díaz, párroco de San Andrés de la IERE (Comunión Anglicana) D. Francisco Javier Izquierdo, presbírero de la Comunidad Apostólica Fronteras Abiertas y D. Jesús Jaime, sacerdote de la Iglesia Católica Romana y Delegado episcopal de Ecumenismo y Diálogo Interreligioso de la diócesis de Zaragoza, en un signo y testimonio de fraternidad.

Ofrecemos un breve reportaje gráfico de la ceremonia:








Fotografías gentileza de CAFA-Zaragoza






sábado, 24 de abril de 2021

ORACIÓN: EL SILENCIO

El valor del silencio

CLAVE:
  • Tres veces al día, todo se detiene de Taizé: el trabajo, los estudios bíblicos, los intercambios. Las campanas llaman para la oración en la iglesia. Centenas, a veces miles de jóvenes de países muy diversos de todo el mundo, rezan y cantan con los hermanos de la Comunidad. La Biblia se lee en varias lenguas. En medio de cada oración común, el largo tiempo de silencio es un momento único de encuentro con Dios.

Silencio y oración

Si nos dejamos guiar por el libro más antiguo de oración, los Salmos bíblicos, encontraremos en ellos dos formas principales de la oración. Por un lado, la lamentación y la llamada de auxilio, y por otra el agradecimiento y la alabanza. De un modo más escondido, existe un tercer tipo de oración, sin súplica ni alabanza explícita. El Salmo 131, por ejemplo, no es más que calma y confianza: «Mantengo mi alma en paz y en silencio… Pon tu esperanza en el Señor, ahora y por siempre.»

A veces la oración calla, pues una comunión apacible con Dios puede prescindir de palabras. «Acallo y modero mis deseos, como un niño en brazos de su madre.» Como un niño privado de su madre que ha dejado de llorar, así puede ser «mi alma en mí» en presencia de Dios. La oración entonces no necesita palabras, quizás ni reflexiones.

¿Cómo llegar al silencio interior? A veces permanecemos en silencio, pero en nuestro interior discutimos fuertemente, confrontándonos con nuestros interlocutores imaginario o luchando con nosotros mismos. Mantener nuestra alma en paz supone una cierta sencillez: «No pretendo grandezas que superan mi capacidad.» Hacer silencio es reconocer que mis preocupaciones no pueden mucho. Hacer silencio es dejar a Dios lo que está fuera de mi alcance y de mis capacidades. Un momento de silencio, incluso muy breve, es como un descanso sabático, una santa parada, una tregua respecto a las preocupaciones.

La agitación de nuestros pensamientos se puede comparar a la tempestad que sacudió la barca de los discípulos en el mar de Galilea cuando Jesús dormía. También a nosotros nos ocurre estar perdidos, angustiados, incapaces de apaciguarnos a nosotros mismos. Pero también Cristo es capaz de venir en nuestra ayuda. Así como amenazó el viento y el mar y «sobrevino una gran calma», él puede también calmar nuestro corazón cuando éste se encuentra agitado por el miedo y las preocupaciones (Marcos 4).

Al hacer silencio, ponemos nuestra esperanza en Dios. Un salmo sugiere que el silencio es también una forma de alabanza. Leemos habitualmente el primer versículo del salmo 65: «Oh Dios, tú mereces un himno». Esta traducción sigue la versión griega, pero el hebreo lee en la mayor parte de las Biblias: «Para ti, oh Dios, el silencio es alabanza.» Cuando cesan las palabras y los pensamientos, Dios es alabado en el asombro silencioso y la admiración.

La Palabra de Dios: trueno y silencio

En el Sinaí, Dios habla a Moisés y a los israelitas. Truenos, relámpagos y un sonido te trompeta cada vez más fuerte precedía y acompañaba la Palabra de Dios (Éxodo 19). Siglos más tarde, el profeta Elías regresa a la misma montaña de Dios. Allí vuelve a vivir la experiencia de sus ancestros: huracán, terremoto y fuego, y se encuentra listo para escuchar a Dios en el trueno. Pero el Señor no se encuentra en los fenómenos tradicionales de su poder. Cuando cesa el ruido, Elías oye «un susurro silencioso», y es entonces cuando Dios le habla. (1 Reyes 19).

¿Habla Dios con voz fuerte o en un soplo de silencio? ¿Tomaremos como modelo al pueblo reunido al pie del Sinaí? Probablemente sea una falsa alternativa. Los fenómenos terribles que acompañan la entrega de los diez mandamientos subrayan su importancia. Guardar los mandamientos o rechazarlos es una cuestión de vida o muerte. Quien ve a un niño correr hacia un coche que está pasando tiene razón de gritar lo fuerte que pueda. En situaciones análogas, han habido profetas que han anunciado la palabra de Dios de modo que resuene fuertemente a nuestros oídos.

Palabras que se dicen con voz fuerte se hacen oír, impresionan. Pero sabemos bien que éstas no tocan casi los corazones. En lugar de una acogida, éstas encuentran resistencia. La experiencia de Elías muestras que Dios no quiere impresionarnos, sino ser comprendido y acogido. Dios ha escogido «una voz de fino silencio» para hablar. Es una paradoja:

Dios es silencioso, y sin embargo habla

Cuando la palabra de Dios se hace «voz de fino silencio», es más eficaz que nunca para cambiar nuestros corazones. El huracán del monte Sinaí resquebrajaba las rocas, pero la palabra silenciosa de Dios es capaz de romper los corazones de piedra. Para el propio Elías, el súbito silencio era probablemente más temible que el huracán y el trueno. Las manifestaciones poderosas de Dios le eran, en cierto sentido, familiares. Es el silencio de Dios lo que le desconcierta, pues resulta tan diferente a todo lo que Elías conocía hasta entonces.

El silencio nos prepara a un nuevo encuentro con Dios. En el silencio, la palabra de Dios puede alcanzar los rincones más ocultos de nuestro corazón. En el silencio, la palabra de Dios es «más cortante que una espada de dos filos: penetra hasta la división del alma y del espíritu.» (Hébreos 4,12). Al hacer silencio, dejamos de escondernos ante Dios, y la luz de Cristo puede alcanzar y curar y transformar incluso aquello de lo que tenemos vergüenza.

Silencio y amor

Cristo dice: «Éste es mi mandamiento: que os améis los unos a los otros como yo os he amado» (Juan 15,12). Tenemos necesidad de silencio para acoger estas palabras y ponerlas en práctica. Cuando estamos agitados e inquietos, tenemos tantos argumentos y razones para no perdonar y no amar demasiado y con facilidad. Pero cuando mantenemos «nuestra alma en paz y en silencio», estas razones se desvanecen. Quizás evitamos a veces el silencio, prefiriendo en vez cualquier ruido, cualquier palabra o distracción, porque la paz interior es un asunto arriesgado: nos hace vacíos y pobres, disuelve la amargura y las rebeliones, y nos conduce al don de nosotros mismos. Silenciosos y pobres, nuestros corazones son conquistados por el Espíritu Santo, llenos de un amor incondicional. De manera humilde pero cierta, el silencio conduce a amar.


FUENTE:
COMUNIDAD DE TAIZÉ





viernes, 23 de abril de 2021

CICLO MÚSICA SACRA - ÁVILA

CONCIERTO JOIRE ÁVILA
JOVEN ENSEMBLE INTERRELIGIOSO ESPAÑOL
CONCIERTO DE MÚSICA SACRA

El 25 de abril a las 17'30 horas en el  Auditorio Municipal de San Francisco, Calle Valladolid s/n de Ávila. Música para tres Almas Con el Joven Ensemble Interreligioso Español bajo la dirección del maestro Julio A Maroto.

JOIRE (Joven Ensemble Interreligioso Español) surge hace cuatro meses por la iniciativa de ARCO FORUM desde la campaña Harmony CommUnity del proyecto Europeo CommUnity Project. Es un ensemble formado por jóvenes músicos y cantantes profesionales españoles representantes de las tres religiones monoteístas que imperan en las culturas de nuestro mundo: judaísmo, cristianismo e islam

El Poder de una melodía para la elevación de tu Alma


ENTRADAS:

En el siguiente enlace:


Por favor, rellenar el siguiente FORMULARIO indicando las actividades en las que deseas participar.


PAQUETE DE VIAJE CULTURAL en Ávila junto al Joven Ensemble Interreligiosos Español - JOIRE

Este sábado y domingo, 24 y 25 de abril ARCO FORUM organiza un VIAJE CULTURAL en Ávila junto a JOIRE.

Se realizarán 2 visitas culturales:
  • El sábado 24 de abril se realizará la primera visita cultural sobre "Los Misterios y Leyendas de Ávila" a las 18'00 horas.
  • El domingo 25 de abril se realizará la segunda visita cultural sobre "Mujeres  ilustres abulenses" a las 11'30 horas.
Aforo limitado. 

Para participar hay que rellenar el siguiente formulario y recibir un correo de confirmación.


Desarrollo de la actividad:

Paquete Cultural del Viaje Cultural a Ávila con JOIRE:

DÍA 1- SÁBADO 24 abril 2021

17'00-18'00 horas: Llegada a Ávila - Entrada y Acomodación en CITes (Check-in)
18'00-20'00 horas: Visita Cultural Ávila 1: "Los Misterios y Leyendas de Ávila"
21'00-22'00 horas: Cena
22'00-23'30 horas: Proyección y debate de la película-documental "El Sultán y el Santo"

DÍA 2 - DOMINGO 25 abril 2021

09'00-10'00 horas: Desayuno
10'00-11'30 horas: Encuentro de Scriptural Reasoning "Alabanzas"
11'30-13'30 horas: Visita Cultural Ávila 2: "Mujeres Ilustres Abulenses "
14'30-15'30 horas: Comida
15'30-17'30 horas: Tiempo libre
17'30-18'30 horas: CONCIERTO JOIRE





jueves, 22 de abril de 2021

DIÁLOGO MULTILATERAL

Secretario general interino del  Consejo Mundial de Iglesias: “Estamos unidos por un parentesco universal a través de Dios”

Durante un diálogo multilateral sobre Fratelli tutti, el secretario general interino del Consejo Mundial de Iglesias, Rev. Prof. Dr. Ioan Sauca, habló sobre “Fraternidad, diálogo interreligioso y justicia social”.

Se unió a líderes religiosos, así como a representantes de la ONU, la Organización Internacional del Trabajo, la Organización Mundial de la Salud y la Cruz Roja Internacional el 15 de abril para el evento en línea. Habló en un panel con representantes del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, Real Instituto de Estudios Interreligiosos y Seminario Rabínico Latinoamericano del Movimiento Conservador en Buenos Aires, Argentina.

“La fraternidad humana en su sentido más amplio e inclusivo es el reconocimiento de que estamos unidos en un parentesco universal a través de Dios, la fuente de nuestro ser y bienestar”, dijo Sauca. “El Consejo Mundial de Iglesias considera el diálogo interreligioso como 'un medio para vivir nuestra fe en Cristo al servicio de la comunidad con nuestros vecinos', como afirma uno de nuestros primeros documentos”.

Desde sus inicios hace 50 años, el compromiso del Consejo Mundial de Iglesias en el diálogo interreligioso se ha arraigado en la búsqueda concreta de la justicia y la paz, señaló Sauca. “Es para nosotros un llamado a un discipulado costoso, donde estamos presentes en los puntos sangrantes de una humanidad quebrantada y estamos atentos al gemido de toda la creación”, dijo. "Por lo tanto, nuestro compromiso interreligioso ha abordado constantemente los problemas de justicia y paz con un espíritu de honestidad y esperanza".

Sauca dijo que ve una fuerte resonancia del mismo espíritu en Fratelli Tutti. “La atención a las heridas del mundo es clave para la justicia social y la fraternidad humana”, dijo. “Incluso mientras construimos sobre nuestros puntos en común, también es hora de vendar con compasión la herida de los heridos por la injusticia y la violencia, así como de romper valientemente con los errores del pasado que han contribuido a generar mucho odio y daño”.


FUENTE:
https://www.oikoumene.org/






miércoles, 21 de abril de 2021

ORIENTE / OCCIDENTE


Occidente abraza al Oriente, Chuang-tzu y Teresa de Ávila

por Leonardo Boff

Por más que el mundo moderno se haya secularizado, el hecho es que gran parte de la humanidad encuentra el sentido de la vida en los caminos espirituales de sus respectivas culturas. Los caminos espirituales son muchos. Sin desmerecer otros, quiero destacar dos que están en la base de dos grandes culturas: la de Occidente y la de Oriente. Cabe recordar que espiritualidad no es saber sobre la Suprema Realidad, sino experimentarla a partir de la totalidad de nuestro ser.

Occidente afirma: existe el camino de la comunión personal con la Suprema Realidad que incluye el Todo.

El Oriente sostiene: existe el camino de la comunión con el Todo que incluye la Suprema Realidad.

En Occidente predomina la comunión personal y dialogal con la Suprema
Realidad, que en la tradición judeocristiana y musulmana se llama simplemente Dios. No se trata de una experiencia intelectual, de la cabeza, sino amorosa, del corazón que siente, ama y vibra, envolviendo todo el ser. Maestros de esta experiencia son, entre otros, San Francisco de Asís, Santa Teresa de Ávila, San Juan de la Cruz y Teilhard de Chardin.

Dice San Juan de la Cruz en su Cántico Espiritual refiriéndose a Dios: 

“Descubre tu presencia.
Máteme tu vista y hermosura.
Mira que la pena de amor no se cura
sino con la presencia y la figura”

(verso 11).

Santa Teresa de Ávila no es menos efusiva en sus Aspiraciones de vida eterna:

“Vivo sin vivir en mí,
después que muero de amor
porque vivo en el Señor
que me quiso para sí.
Cuando el corazón le di
puse en él este letrero:
que muero porque no muero”

(verso 1).

Este modo de hablar es el del enamoramiento, el del encuentro íntimo y profundo con Dios. A partir de esta comunión yo-tú, se entrevé Dios en el Todo y en cada ser, como aparece en la mística cósmica de San Francisco que emocionalmente llama a las criaturas mis hermanas y mis hermanos. San Juan abre su primera epístola así: “Aquel que nosotros tocamos, que hemos visto con nuestros ojos y hemos oído con nuestros oídos, ése os lo comunicamos”. Es una experiencia concreta, tocar, sentir y ver.

En Oriente la experiencia primera reside en el Todo. Nada está aislado. Todo está relacionado formando el Gran Todo. El maestro yogui responde a la pregunta: “¿Quién eres tú? Él señala el universo y dice: tú eres todo eso, toda la realidad, parte del Todo, tú eres el Todo”. Nuestro extravío se produce porque hemos perdido la memoria sagrada de que somos un eslabón de la única y gran corriente de la vida, parcela del Todo. No hacemos una experiencia de no-dualidad con todas las cosas: somos árbol, somos pájaro, somos las estrellas, estamos sumergidos en el Todo. Y el Todo se llama Tao, la Suprema Realidad presente en todo.

Tomas Merton que vivió en Occidente la experiencia del Oriente tradujo La vía de Chuang-tzu (Vozes 1993). Alguien preguntó a Chuang-tzu: ”Muéstrame dónde puede ser encontrado el Tao. A lo que él respondió: No hay lugar donde el Tao no pueda ser encontrado: está en la hormiga, en la vegetación del pantano, en el pedazo de ladrillo, en el excremento, y concluyó: el Tao es grande en todo, completo en todo, integral en todo. Estos aspectos son distintos, pero la Realidad es el Uno” (p. 158-159). Como se deduce, las cosas son diversas pero todas desaguan en el Uno, en el Tao.

¿Cómo se lleva a cabo una experiencia de no-dualidad? Los orientales proponen como primer ejercicio: la experiencia de la luz. Ella incide sobre nuestras cabezas, baña todo el organismo, atraviesa las paredes de la casa, el jardín, la ciudad, el océano, toda la Tierra y se extiende por todo el universo. La persona, hecha luz, se siente unida a cada cosa, al Todo.

Los caminos de Oriente y de Occidente no son antagónicos sino complementarios. Ambos intentan, fundamentalmente, crear en nosotros lo que tanto buscamos: un centro a partir del cual todo se liga y re-liga y nos permite vivir el Todo. Poco importa el nombre con el que llamamos a ese centro. Corresponde a lo que significa Dios, Tao, Alá, Yavé, Olorum. Ese centro está en nosotros pero también nos desborda. Es el misterio vivo e interior de nuestra vida y del universo.

Entre nosotros tenemos también la experiencia espiritual que subyace a las religiones afro-brasileras u otras que asimilan elementos africanos. Todo gira alrededor del axé, que corresponde más o menos al qi de los orientales o a la ruah, pneuma, espíritus de los occidentales: una energía cósmica que impregna toda la realidad y tiene sus principales portadores en los seres humanos. Exu, no es el demonio que se debe invocar, sino la principal expresión del axé. El axé actúa dentro de nosotros, como fuerza de irradiación y de captación de buenas energías, puestas al servicio de los demás. Por no entender la profundidad, ecológica incluso, de estas religiones de origen africano, son difamadas y hasta perseguidas por grupos neopentecostales que tienen poco de espiritual y de sentido de lo sagrado de todas las cosas.

Somos seres espirituales cuando nos sumergimos en nuestra profundidad y nos damos cuenta de que somos parte de un Todo que nos transciende. Estamos habitados por el espíritu, aquel momento de la conciencia por el cual tenemos la percepción de ser parte de un todo y que el Todo está en nosotros.

La espiritualidad occidental u oriental tiene que ver con la experiencia de la Suprema Realidad, no con un saber, expresado en doctrinas, dogmas y ritos. Todo esto es parte de las religiones que nacieron de una experiencia espiritual, pero que no son la espiritualidad. Pueden fomentarla, igual que pueden sofocarla por exceso de doctrinas. Son agua canalizada, no fuente de agua cristalina. De esa agua todos tenemos sed. Al beberla nos hacemos más humanos y abiertos unos a otros y al Todo.


FUENTE:
BOLETÍN DE “NOTICIAS Y COMUNICACIONES” 
Nº 293 – 20 de ABRIL de 2021 
Comunidad Ecuménica Horeb Carlos de Foucauld 
http://horeb-foucauld.webs.com










martes, 20 de abril de 2021

DECLARACIÓN CONJUNTA EN EL XX ANIVERSARIO DE LA CARTA ECUMÉNICA EUROPEA

Declaración conjunta del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) y la Conferencia de Iglesias Europeas (CEC) en el XX Aniversario de la Carta Ecuménica

La “Carta Ecuménica – Directrices para la cooperación creciente entre las Iglesias en Europa”, firmada en 2001 por los presidentes de la CCEE y la CEC, es un documento fundamental que busca preservar y desarrollar la hermandad entre las Iglesias europeas. Para celebrar el vigésimo aniversario de la Carta, el cardenal Angelo Bagnasco, presidente del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa (CCEE), y el reverendo Christian Krieger, presidente de la Conferencia de Iglesias Europeas (CEC), emitieron una declaración conjunta en la que se felicitan y dan gracias a Dios "por la paz que hemos experimentado y por los logros del movimiento ecuménico mundial".

Mientras las Iglesias redefinen su ministerio en medio de la pandemia de la Covid-19, los dos presidentes reafirman "juntos y con un espíritu de unidad el compromiso de dar testimonio de Cristo como nuestro Salvador y su promesa de una vida transformada en el poder de Espíritu Santo", consciente de que "las viejas y nuevas divisiones en la Iglesia necesitan curación, las desigualdades sociales y económicas exigen la transformación de nuestras actitudes y nuestras estructuras. Las continuas amenazas a la democracia y el medio ambiente exigen una atención renovada a la totalidad de la vida. La reaparición de conflictos armados y atentados terroristas en algunas partes del continente en los últimos años exige arrepentimiento, perdón y justicia"

Finalmente, nos invitan a rezar para que todos sean uno: “queremos ser instrumentos de esta unidad y comprometernos nuevamente en el fortalecimiento de la comunión eclesial a través de la oración y la acción común, ofreciendo al mundo nuestro servicio para la promoción de la justicia y de paz".

Como parte de las celebraciones de este aniversario, la CCEE y la CEC están organizando un momento ecuménico on line para el jueves día 22 de abril de 2021 de 19'00 a 20'30 horas (CEST).

Todas las Iglesias y colaboradores ecuménicos están invitados a participar en el evento, titulado: "Sed alegres en la esperanza, pacientes en el sufrimiento, perseverantes en la oración", inspirado en el versículo de la carta a los Romanos 12.12.

Para la ocasión, se publicará una ayuda con materiales del momento ecuménico, así como reflexiones sobre las Directrices. El folleto, disponible para descarga gratuita en los sitios web de CCEE y CEC en inglés, francés, alemán e italiano, está destinado a iglesias y se puede utilizar durante todo el año para celebraciones locales.

Para participar en el evento, debe registrarse en el siguiente enlace: 


Para seguir la transmisión en vivo en YouTube en el siguiente enlace:




TEXTO INTEGRO DE LA DECLARACIÓN CONJUNTA

20 aniversario de la Charta Oecumenica
Declaración conjunta de los presidentes del Consejo de Conferencias Episcopales de Europa y de las Conferencias de Iglesias Europeas

12 de abril de 2021

En los últimos veinte años, el continente europeo ha experimentado en general un período de paz, junto con una mejora de las relaciones ecuménicas. Esto se puede constatar en nuestra vida cotidiana donde se ofrece un testimonio común, la acción en el ecumenismo local, así como matrimonios interreligiosos. Se alcanzaron varios acuerdos teológicos y ya hay una nueva generación de teólogos que se formó ecuménicamente. Varias iniciativas han florecido interreligioso. Las Iglesias han fortalecido su trabajo para un mundo más justo y pacífico, más recientemente ante el desplazamiento de personas entre continentes y han aumentado sus esfuerzos por el cuidado de la creación. El mensaje de la Carta Ecuménica ha contribuido y dado nuevo vigor a todo este crecimiento y transformación. Ante la paz que hemos experimentado y los logros alcanzados gracias al movimiento ecuménico mundial, nos felicitamos y damos gracias a nuestro Dios Creador.

Mientras luchamos por el Reino de Dios, nuestras sociedades e Iglesias se enfrentan ante nuestras debilidades humanas y a todo tipo de divisiones. Divisiones antiguas y nuevas en la Iglesia necesita sanación, las desigualdades sociales y económicas requieren la transformación de nuestras actitudes y estructuras. Las constantes amenazas a la democracia y al medio ambiente necesitan una atención renovada a la totalidad de la vida. El resurgimiento de conflictos armados y atentados terroristas en algunas zonas del continente en los últimos años requieren arrepentimiento, perdón y justicia. Frente a estas realidades, mientras las Iglesias adaptan su misión en este periodo de pandemia por la Covid-19, en un espíritu de unidad, juntos reafirmamos nuestro compromiso de dar testimonio de Cristo como nuestro Salvador y de su promesa de una nueva vida fruto del Espíritu Santo.

Siguiendo el designio de Nuestro Señor, expresado en Juan 17 y en la Carta Ecuménica «Que todos sean uno», somos conscientes de que la unidad de los cristianos no es solo el resultado de nuestros esfuerzos humanos. Al mismo tiempo, esta unidad, por la que Jesús oró y sufrió, debe ser perceptible en este mundo. En este sentido, queremos ser instrumentos de esta unidad y comprometernos nuevamente a fortalecer la comunión eclesial a través de la oración y la acción comunes, ofreciendo al mundo nuestro servicio para la promoción de la justicia y la paz.

Reverendo Christian Krieger 
Presidente de la CEC

Cardenal Angelo Bagnasco 
Presidente del CCEE

FUENTE:
https://www.agenciasic.es/






lunes, 19 de abril de 2021

CARTA ECUMÉNICA EUROPEA


Carta Ecuménica de Europa

Directrices de la Conferencia de Iglesias Europeas (KEK) y del Consejo de Conferencias Episcopales Europeas (CCEE)
con vistas a una colaboración creciente entre las Iglesias en Europa (Estrasburgo, 22-4-2001)


"Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo"



La Conferencia de Iglesias Europeas KEK) y el Consejo de Conferencias Episcopales Europeas (CCEE), en el espíritu de¡ mensaje de las dos Asambleas Ecuménicas de Basilea en 1989 y de Graz en 1997, estamos firmemente determinados a mantener y desarrollar la comunión que ha ido creciendo entre nosotros. Damos gracias al Dios Trinidad por haber guiado nuestros pasos, mediante su Espíritu Santo, hacia una comunión cada vez más intensa.

Muchas formas de colaboración ecuménica ya han tenido ocasión de demostrar su valía. Fieles a la oración de Jesucristo: "Que todos sean uno, como tú, Padre, en mí y yo en ti, que ellos también lo sean en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado" (Jn 17, 21). no debemos sin embargo conformarnos con la actual situación. Al contrario, conscientes de nuestras faltas y dispuestos a la conversión, hemos de esforzarnos por vencer las divisiones que aún nos separan, para anunciar juntos, de forma creíble, la Buena Nueva de¡ Evangelio entre los pueblos.

Escuchando juntos la Palabra de Dios en la Santa Escritura, y llamados a confesar nuestra fe común, así como a actuar conjuntamente conforme a la verdad que hemos recibido, querernos dar testimonio del amor y, de la esperanza ante todos nuestros hermanos y hermanas.

En nuestro continente europeo, desde el Atlántico hasta los Urales, del Cabo Norte al Mediterráneo, territorio marcado hoy más que nunca por una pluralidad de culturas, queremos, con el Evangelio, comprometernos por la dignidad de la persona como imagen de Dios y, en nuestra calidad de Iglesias, contribuir a la reconciliación de pueblos y culturas.

Por ello adoptamos la presente Carta como compromiso común por el diálogo y la colaboración. Este documento describe las tareas ecuménicas básicas, de las que desprende una serie de directrices y compromisos. Pretende promover, en todos los niveles de la vida eclesial, una cultura ecuménica de diálogo y colaboración, proporcionando con ese fin una norma vinculante. Pese a ello, no tiene ningún carácter doctrina¡, dogmático o canónico.

Su carácter vinculante consiste más bien en el deber que asumen las mismas Iglesias y organizaciones ecuménicas que la suscriben, las cuales pueden formular, partiendo de esta base textual, sus propias adiciones, así como perspectivas comunes concretamente conjugadas con sus retos específicos y con las obligaciones que de éstos dimanen.


I. CREEMOS EN "LA IGLESIA, QUE ES UNA, SANTA, CATÓLICA Y APOSTÓLICA"

"Esforzaos en mantener la unidad del Espíritu, con el vínculo de la paz. Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la meta de la esperanza en la vocación a la que habéis sido convocados. Un Señor, una fe, un bautismo. Un Dios, Padre de todo, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo invade todo" (Ef 4, 3-6)


1. Llamados juntos a la unidad en la fe

Conforme al Evangelio de Jesucristo, y tal y como atestigua la Sagrada Escritura y formula la confesión de fe ecuménica niceno-constantinopolitana de 381, creemos en el Dios Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo. Como en dicho símbolo confesamos "la Iglesia, que es una, santa,católica y apostólica", nuestro deber ecuménico insoslayable consiste en hacer visible esta unidad que siempre es y será don de Dios.

Diferencias esenciales en la fe siguen impidiendo la unidad visible. Se trata sobre todo de concepciones divergentes de la Iglesia y su unidad, de los sacramentos y los ministerios. No debemos asumir sin más este estado de cosas. Jesucristo nos reveló en la cruz su amor y el misterio de la reconciliación. Al seguirlo, queremos hacer todo lo que nos sea posible para superar los problemas y obstáculos que siguen separando a las Iglesias.

Nos comprometemos pues:
  • A seguir la exhortación apostólica de la Carta a los Efesios y a acometer perseverantes esfuerzos por una comprensión común de la Buena Nueva de la salvación en Cristo propia del Evangelio.
  • A trabajar además, con el poder de¡ Espíritu Santo, por la unidad visible de la Iglesia de Jesucristo en la única fe, fe que halla expresión en un bautismo recíprocamente reconocido y en la comunión eucarística, así como en el testimonio y el servicio.

II. POR El CAMINO DE LA COMUNIÓN VISIBLE DE LAS IGLESIAS DE EUROPA

"La señal por la que conocerán que sois discípulos míos, será que os amáis unos a otros" (Jn 13, 35)


2. Anunciar juntos el Evangelio

La tarea más importante de las Iglesias que están en Europa consiste en anunciar el Evangelio con palabras y obras para la salvación de todos los hombres. La falta de orientación en muchos ámbitos, el distanciamiento de los valores cristianos, pero también una búsqueda multiforme de sentido, constituyen otros tantos retos para un testimonio especial de la fe por parte de los cristianos. Para ello es menester un mayor compromiso y un intercambio de experiencias en la catequesis y en la pastoral de las comunidades locales. También resulta importante que todo el Pueblo de Dios se esfuerce por transmitir unido el Evangelio en el seno de la sociedad, así como a promoverlo mediante el compromiso social y la atención a la responsabilidad política.

Nos comprometemos pues:

  • A hablar de nuestras iniciativas de evangelización con las demás Iglesias, suscribir acuerdos al respecto y evitar con ello una competencia perjudicial, junto con el peligro de nuevas divisiones;
  • A reconocer que toda persona puede elegir su compromiso religioso y celesial con libertad de conciencia. Nadie debe verse inducido a la conversión por presión moral o por incentivos materiales. Análogamente, nadie puede verse impedido de convertirse con arreglo a su libre decisión.

3. Marchar los unos hacia los otros

En el espíritu del Evangelio, hemos de revisar juntos la historia de las Iglesias cristianas, historia marcada por experiencias positivas, pero también por divisiones, hostilidades e incluso conflictos armados. Fallos humanos, falta de amor y el mal uso frecuente de la fe y de las Iglesias con intereses políticos han deteriorado gravemente el crédito del testimonio cristiano.

El ecumenismo comienza pues para los cristianos por la renovación de los corazones y su disposición a la penitencia y a la conversión. La reconciliación ya ha registrado avances en el seno del movimiento ecuménico.

Resulta importante reconocer los dones espirituales propios de las diferentes tradiciones cristianas, para que unas aprendan de otras y puedan así recibir los dones de las demás. Para el desarrollo del ecumenismo, resulta particularmente necesario considerar las experiencias y expectativas de los jóvenes y fomentar la participación de éstos con arreglo a sus propios medios.

Nos comprometemos pues:
  • A superar nuestra suficiencia y rechazar los prejuicios, a buscar el encuentro entre nosotros y estar a disposición unos de otros;
  • A fomentar una apertura ecuménica y la cooperación en la educación cristiana, tanto en la formación teológica inicial y permanente como en la investigación.

4. Actuar juntos

El ecumenismo ya es una realidad en numerosas modalidades de acción común. Muchos cristianos de las diferentes Iglesias viven y actúan juntos en relaciones de amistad, de vecindad, laborales y familiares. Deberá ayudarse de manera especial a los matrimonios mixtos para que vivan el ecumenismo en el día a día.

Recomendamos que se organicen y sostengan grupos de colaboración ecuménica bilaterales y multilaterales en ámbito local, regional, nacional e internacional. Es preciso reforzar la colaboración en ámbito continental entre la Conferencia de Iglesias Europeas y el Consejo de Conferencias Episcopales Europeas y organizar más asambleas ecuménicas europeas.

Si surgieran conflictos entre Iglesias, deberán realizarse o apoyarse los correspondientes esfuerzos de mediación y pacificación.

Nos comprometemos pues:
  • A actuar juntos en todos los ámbitos de la vida de la Iglesia cuando las condiciones lo permitan, siempre y cuando motivos de fe o de mayor conveniencia no se opusieran a ello;
  • A defender los derechos de las minorias y ayudar a reducir en nuestros países las incomprensiones y prejuicios entre Iglesias mayoritarias y minoritarias.

5. Orar unos por otros

El ecumenismo se alimenta al escuchar juntos la Palabra de Dios y dejando que el Espíritu Santo actúe en nosotros y a través de nosotros. En virtud de la gracia así recibida, se dan en la actualidad muchas ocasiones de ahondar la comunión espiritual entre las iglesias mediante plegarias y celebraciones, y de orar por la unidad visible de la Iglesia de Cristo. La comunión eucarística aún por conseguir constituye una señal particularmente dolorosa de la división que todavía existe entre muchas Iglesias cristianas.

En algunas Iglesias subsisten reservas acerca de las oraciones ecuménicas en común; sin embargo de ello, muchas celebraciones ecuménicas, cantos comunes y oraciones litúrgicas -como el Padrenuestro- marcan ya de forma incisiva nuestra espiritualidad cristiana.

Nos comprometemos pues:
  • A orar unos por otros y por la unidad cristiana;
  • A aprender a conocer y apreciar la liturgia y las restantes formas de vida espiritual de ¡as demás Iglesias;
  • A tender hacia el objetivo de la comunión eucarística.

6. Proseguir el diálogo

Nuestra pertenencia mutua, basada en Cristo, resulta de fundamental importancia ante nuestras diferentes posiciones teológicas y éticas. Al contrario de la diversidad enriquecedora que nos es dada, las oposiciones doctrinales en cuestiones éticas y normas canónicas han provocado también rupturas entre Iglesias; en ello, además, también han desempeñado un papel decisivo las circunstancias históricas específicas y los diferentes rasgos culturales.

Para ahondar en la comunión ecuménica deben proseguirse los esfuerzos con vistas a un consenso en la fe. Sin unidad en la fe no puede darse la plena comunión eclesial. No existe alternativa alguna al diálogo.

Nos comprometemos pues:
  • A continuar de forma tan consciente como intensa el diálogo entre nuestras iglesias en diferentes niveles, así como a examinar, en los resultados de los diálogos, lo que puede y debe declararse oficialmente obligatorio;
  • En caso de controversia, especialmente sí existiera una amenaza de división por cuestiones de fe y de naturaleza ética, a procurar el intercambio y discutir juntos dichas cuestiones a la luz del Evangelio.

III. NUESTRA RESPONSABILIDAD COMÚN EN EUROPA

"Dichosos los que trabajen por la paz, porque ellos se llamarán los hijos de Dios" (Mt 5, 9)


7. Participar en la construcción de Europa

En el curso de los siglos ha ido desarrollándose una Europa marcada, en el plano religioso y cultura¡, por el cristianismo. Contemporánea mente, el incumplimiento de los cristianos ha producido muchas desgracias tanto en Europa como fuera de ella.

Reconocemos nuestra cuota de responsabilidad en esta culpa, y pedimos perdón por ella a Dios y a los hombres.

Nuestra fe nos ayuda a aprender el pasado y a emplearnos para que la fe cristiana y el amor al prójimo difundan la esperanza en campo ético y moral, en la formación y en la cultura, en la política y en la economía, así en Europa como en el mundo entero.

Las Iglesias alientan la unidad del continente europeo. Sin valores comunes, ésta no puede alcanzarse de forma duradera. Estamos convencidos de que el legado espiritual del cristianismo constituye una fuerza de inspiración que enriquece a nuestro continente. Sobre la base de nuestra fe cristiana, nos comprometemos con vistas a una Europa humana y social en la que se impongan los derechos humanos y los valores fundamentales de paz, justicia, libertad, tolerancia, participación y solidaridad. Insistimos en el respeto a la vida, el valor M matrimonio y de la familia, la opción preferencia¡ por los pobres, la disposición al perdón, y, en toda materia, en la misericordia.

Como Iglesias y comunidades internacionales, hemos de hacer frente al peligro de una Europa que se desarrolle con un Oeste integrado y un Este desintegrado. También debe tomarse en consideración el desequilibrio Norte-Sur. Contemporáneamente, es preciso evitar todo eurocentrismo y reforzar la responsabilidad de Europa para con toda la Humanidad, especialmente hacia los pobres del mundo entero.

Nos comprometemos pues:
  • A ponernos a la escucha mutua de los contenidos y objetivos de nuestra común responsabilidad social, y a apoyar juntos en la mayor medida posible los objetivos y perspectivas de las Iglesias en relación con las instituciones seculares europeas;
  • A defender los valores fundamentales contra toda agresión;
  • A oponernos a todo intento de instrumentalizar la religión y la Iglesia con fines de afirmación étnica y nacionalista.

8. Reconciliar pueblos y culturas

Consideramos una riqueza de Europa la diversidad de sus tradiciones regionales, nacionales, culturales y religiosas. Ante el gran número de conflictos, es misión de las Iglesias contribuir juntas al servicio de la reconciliación de pueblos y culturas. Sabemos que la paz entre las Iglesias resulta para ello una importante condición previa.

Nuestros esfuerzos comunes tienen como objeto la valoración crítica y la solución de las cuestiones políticas y sociales conforme al espíritu evangélico. Al considerar a toda persona y a su dignidad como imagen de Dios, nos hacemos garantes de la absoluta igualdad de valor de todos los hombres.

Como Iglesias, queremos alentar conjuntamente el proceso de democratización europea. Nos comprometemos con un orden pacífico, sobre la base de la solución no-violenta de los conflictos. Condenamos toda forma de violencia contra seres humanos, en especial contra mujeres y niños.

Es tarea de la reconciliación el fomento de la justicia social en todos los pueblos y entre ellos, y en primer lugar la superacíón del abismo entre pobres y ricos, así como la victoria sobre el desempleo. Juntos queremos contribuir a que los inmigrantes, los refugiados y los demandantes de asilo se vean acogidos con dignidad en Europa.

Nos comprometemos pues:
  • A oponernos a toda forma de nacionalismo, doctrina que lleva a la opresión de otros pueblos y de las. minorías nacionales, y a comprometernos con vistas a soluciones no-violentas;
  • A reforzar el papel de la mujer y la igualdad de sus derechos en todos los ámbitos de la vida, y a alentar una comunidad equitativa de mujeres y hombres en la Iglesia y en la sociedad.

9. Salvaguardar la creación

Por nuestra fe en el amor del Dios Creador reconocemos con gratitud el don de la creación, el valor y la hermosura de la naturaleza. Vernos sin embargo con temor que los bienes de la tierra son explotados sin consideración por su valor intrínseco y carácter limitado, y sin parar mientes en el bien de las generaciones futuras.

Juntos queremos cooperar en la creación de condiciones de vida duraderas para la creación en su conjunto. Como responsables que somos ante Dios, hemos de hallar y desarrollar criterios comunes para determinar lo que los hombres pueden seguramente hacer desde el punto de vista científico y tecnológico, pero no desde la perspectiva ética. En todo caso, la dignidad única de cada ser humano debe mantener su prioridad ante lo que la técnica pueda realizar.

Recomendamos la institución de una jornada ecuménica de oración en las Iglesias europeas para la salvaguardia de la creación.

Nos comprometemos pues:
  • A fomentar el desarrollo de un estilo de vida con el cual, en contra de las presiones económicas y consumistas, pongamos de relieve una calidad de vida responsable y duradera;
  • A apoyar a las organizaciones eclesiales que actúan en beneficio de¡ medio ambiente y a los organismos ecuménicos en su responsabilidad con vistas a la tutela de la creación.

10. Ahondar la comunión con el judaísmo

Una comunión de carácter único nos une al pueblo de Israel, con el que Dios selló una Alianza eterna. Por la fe, sabemos a nuestros hermanos y hermanas judíos amados por Dios "en atención a los patriarcas, pues los dones y la llamada de Dios son irrevocables" (Rm 11, 28-29). Ellos "fueron adoptados como hijos, tienen la presencia de Dios, la alianza, ¡a ley, el culto y las promesas. Suyos son los patriarcas, de quienes, según lo humano, nació el Mesías ... " (Rm 9, 4S).

Lamentamos y condenamos toda manifestación de antisemitismo como los estallidos de odio y las persecuciones. Pedimos perdón a Dios por el antijudaísmo cristiano y rogamos a nuestros hermanos y hermanas judíos que permitan que nos reconciliemos con ellos.

Urge sobremanera, en el culto y en la catequesis, en la doctrina y en la vida de nuestras Iglesias, poner en evidencia el profundo vínculo de la fe cristiana con el judaísmo, así como apoyar la cooperación judeocristiana.

Nos comprometemos pues:
  • A combatir toda forma de antisemitismo y antijudaísmo en la Iglesia y en la sociedad;
  • A buscar e intensificar en todos los niveles el diálogo con nuestros hermanos y hermanas judíos.

11. Cultivar relaciones con el Islam

Hace siglos que viven musulmanes en Europa. Constituyen fuertes minorías en muchos países europeos. Han existido y siguen dándose numerosos contactos positivos y relaciones de vecindad entre musulmanes y cristianos, pero también reservas y prejuicios generalizados por ambas partes, basados en dolorosas vivencias de la historia y de¡ pasado más reciente.

Queremos intensificar en todos los niveles el encuentro entre cristianos y musulmanes, así como el diálogo entre islam y cristianismo. Recomendamos en especial hablar juntos de la fe en el Dios único y esclarecer el. sentido de los derechos humanos.

Nos comprometemos pues:
  • A salir al encuentro de los musulmanes con actitud de estima;
  • A trabajar con ellos con vistas a objetivos comunes.

12. El encuentro con otras religiones e ideologías

La pluralidad de convicciones religiosas e ideológicas y de formas de vida se ha vuelto característica de la cultura europea. las religiones orientales y los nuevos grupos religiosos van extendiéndose y despertando también interés en muchos cristianos. Existen también cada vez más hombres y mujeres que se apartan de la fe cristiana y se comportan con indiferencia hacia ésta, o que siguen otras visiones del mundo.

Queremos esforzarnos por considerar con seriedad las críticas que se nos formulan y por entablar un debate leal. También procede discernir con qué comunidades se puede buscar el diálogo y el encuentro y respecto a cuáles debe expresarse cautela desde el punto de vista cristiano.

Nos comprometemos pues:
  • A reconocer la libertad de religión y de conciencia de dichas personas y comunidades y a garantizar que tanto individual como colectivamente, en privado y en público, puedan practicar su religión y su visión del mundo en el marco del derecho vigente;
  • A estar abiertos a un diálogo con todos los hombres de buena voluntad, a procurar con ellos objetivos comunes y a testimoniar ante ellos la fe cristiana.

Como Señor de la única Iglesia, Jesucristo es nuestra mayor esperanza de reconciliación y de paz. En su nombre queremos seguir juntos el mismo camino en Europa. Pedimos a Dios la asistencia de su Espíritu Santo.

"El Dios de la esperanza os colme de todo gozo y paz en vuestra fe, hasta rebosar de esperanza por la fuerza del Espíritu Santo" (Rm 15, 13).

En calidad de presidentes de la Conferencia de Iglesias Europeas (KEK) y del Consejo de Conferencias Episcopales Europeas (CCEE), recomendamos a todas las Iglesias y Conferencias Episcopales de Europa que acojan la presente Carta Ecuménica como documento de base, adaptándola cada una a su particular contexto.

Con esta recomendación, firmamos la Carta Ecuménica en el marco del Encuentro Ecuménico Europeo, hoy, primer domingo después de la fiesta de la Pascua común de este año 2001.

Metropolitano Jérémie
Presidente de la KEK

Cardenal Miloslav VIk
Presidente del CCEE


(Versión oficial francesa del original alemán publicada por los organismos firmantes; traducción de ECCLESIA)