Todos juntos
Un espacio propuesto por EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO

miércoles, 19 de junio de 2024

ENCUENTROS EN CALIFORNIA DE THOMAS MERTON

Sobre el libro: “Encuentros en California” de Thomas Merton de Editorial Sal Terrae


CLAVE:
  • Hace un par de semanas ha salido al público “Encuentros en California”, de Thomas Merton, en Editorial Sal Terrae. Se trata de las conferencias que Merton pronunció en el monasterio californiano de Redwoods en 1968. Un documento de un gran valor humano y espiritual, una herramienta extraordinaria para el diálogo interreligioso. publicamos el Índice, el Prefacio y el Posfacio, sería bueno buscar un momento de calma y sosiego espiritual para leerlos. En este momento en que parece que los monasterios están más ocupados en “sobrevivir que en profetizar”, esta aportación de Merton y del autor y traductores del libro, encajan más bien en ese ministerio profético del que nos dio ejemplo San Bonifacio, cuya memoria litúrgica se ha celebrado hace unos días. No se trata, pues de una “propaganda comercial”, sino de presentar una aportación muy valiosa y enriquecedora para nuestros propósitos. Es la aportación de Fernando Beltrán y de Francisco R. de Pascual desde el silencio. Este libro es también fruto de un retiro prolongado en un monasterio de monjas cistercienses en situación muy muy precaria, pero que sigue fiel a su tarea profética. Es una oferta, pues, desde el silencio, el apartamiento y el ruido de los “medios mediáticos” que tanto nos condicionan hoy, con sus aspectos positivos y negativos.


MENCIONES:

«Se trata de una exposición significativa y bien anotada del mensaje del monje lleno de matices con respecto a la experimentación en torno a la conciencia en los años sesenta, pocos meses antes de su muerte en Tailandia. David M. Odorisio, el agudo editor de la reciente obra magistral, Merton & Hinduism, representa una nueva corriente de estudiosos contemplativos que exploran el trabajo interior de Merton, en orden a trascenderse en el servicio a los demás, ofreciendo un testimonio a las comunidades de orantes de carácter global. Odorisio hace evidente en el caso de Merton el continuo olvido de sí en su experiencia de soledad y comunidad, de una hondura cada vez mayor. Merton alumbra la esperanza de que todas las divisiones entre nuestro yo falso y verdadero podrán superarse finalmente en una matriz universal de amor».
Jonathan Montaldo, Bridges to Contemplative Living with Thomas Merton


«Merton daba lo mejor de sí en ambientes informales. Este material recientemente publicado ofrece dos series de charlas a religiosas y dos colecciones de cartas, ambas en su ipsissima verba. Editado con inteligencia, calidez y una clara documentación, el libro hace accesible algunas las últimas y más importantes enseñanzas suyas sobre la oración. Es una importante contribución a las fuentes primarias de Merton».
Bonnie Thurston, Shaped by the End You Live For: Thomas Merton’s Monastic
Spirituality


«¡Qué regalo tan maravilloso e inesperado! Esta serie de charlas informales a una apreciada comunidad de mujeres cistercienses y más tarde a un pequeño grupo de personas invitadas, y los materiales adicionales, aportan el brillo y la inspiración que caracterizan la perspicacia, humor y sabiduría de Thomas Merton. Introducido y editado de forma magistral por David Odorisio, este volumen presenta a Merton en la cima de la literatura cisterciense y llena un vacío que ni siquiera sabíamos que existía en el registro literario de sus últimos meses de su vida».
Patrick F. O’Connell, editor de Thomas Merton: Selected Essays


«Al haber sido uno de los participantes en las Conferencias de Redwoods [de octubre] de 1968, puedo resumir en una palabra el ambiente de aquellos días: electrizante; y eso en todos los aspectos: incluso el intercambio más mundano parecía de alto voltaje. Encuentros en California (1968) otorga a los lectores el privilegio de sentir por sí mismos la formidable carga creativa de esos encuentros como si estuvieran allí. ¿Qué mayor elogio podría hacerse de este libro?».
David Steindl-Rast, OSB, monje, autor, cofundador de grateful.org


«La edición fresca y perspicaz de Odorisio nos ofrece una potente introducción al pensamiento de Merton posterior al Concilio Vaticano II sobre la conciencia humana, que revela su profundo sentido lúdico, su honestidad espiritual y su creencia en la “comunidad cósmica de criaturas”. Estas conferencias de Redwoods de 1968 y las cartas a la madre Myriam Dardenne, OCSO, que suscitaron una experiencia de “aleluya”, gozo y gratitud para Merton, se ponen ahora, por primera vez, a disposición de los lectores contemporáneos. Tienen garantizada una lectura concienzuda y atractiva».
Monica Weis, SSJ, profesora emérita de Lengua Inglesa de la Universidad de Nazaret.


«Con el libro de Thomas Merton, Encuentros en California (1968), editado con maestría por David M. Odorisio, encontramos al Merton maduro de 1968 hablando sobre la oración, la espiritualidad y el diálogo interreligioso, además de otros temas que le preocupaban en aquel momento. Las charlas de Merton a la comunidad de Nuestra Señora de Redwoods, de mayo y octubre de 1968, no habían estado disponibles hasta ahora. Atraerán a los buscadores de todo el mundo porque, como les dice a las hermanas, de forma sencilla pero profunda: “Lo mejor es la oración. Si quieres una vida de oración, el modo de lograrlo es orar”. Estas charlas, pronunciadas pocos días antes de su partida a Asia y semanas antes de su prematura muerte, muestran el profundo arraigo de Merton en la tradición monástica y en su fe católica, sin dejar de estar abierto a otras tradiciones religiosas para llegar a ser, como dice a las hermanas, “tan buen budista como pueda”».
Paul M. Pearson, director del Centro Thomas Merton


«El joven que se consideraba un contemplativo en Greenwich Village ahora cierra el círculo tras décadas de vida monástica en el crisol de la cultura y el pensamiento contemporáneos del norte de California, no solo con sus queridas amigas del monasterio de Redwoods, sino en sus excursiones a San Francisco, clubes de jazz y librerías beat. Las conferencias que aquí se recogen son más bien conversaciones que Merton inicia, y casi se puede oír al inquieto trapense quedarse sin aliento, expectante ante el futuro de la humanidad y el suyo propio. Leer Encuentros en California (1968) permite escuchar no solo la amplitud de conocimiento de Thomas Merton sino también la descripción honesta de su propia vida cotidiana como solitario, que sirve para echar por tierra cualquier idea romántica sobre la vida eremítica. Una mirada profundamente íntima y fascinante a una de las mentes más brillantes y a una de las voces más importantes del siglo XX».
Cyprian Consiglio, OSB Cam, autor de Prayer in the Cave of the Heart and Spirit, Soul, Body


«Aquí escuchamos a Merton con su propia voz, limpia, sin censura, sincera, explorando la conciencia humana a través del prisma del misticismo cristiano, hindú, sufí y zen. Tenemos una deuda de gratitud con David M. Odorisio por su introducción, sumamente cuidada, al paisaje y al espíritu de Redwoods, por las transcripciones de las charlas y cartas de Merton, editadas con gran acierto, y por sus anotaciones a la vez informativas y discretas. Este libro es un tesoro, de rico contenido e inspirador, que tocará la mente y el corazón de sus lectores».
Christine M. Bochen, profesora emérita de estudios religiosos en la Universidad Nazaret, Rochester, Nueva York.


ÍNDICE

THOMAS MERTON
ENCUENTROS EN CALIFORNIA
(1968)
Conferencias y cartas de Redwoods
editadas por David M. Odorisio
Presentación de Kathy DeVico, OCSO
Prefacio de Douglas Christie
Traducción de Fernando Beltrán Llavador y Francisco Rafael de Pascual, OCSO


ÍNDICE

Presentación, por Francisco Rafael de Pascual, OCSO
Prólogo, por Kathy DeVico, OCSO
Prefacio, por Douglas Christie
Introducción: «Los balcones nocturnos de California» — Thomas Merton en la Costa Perdida, por David M. Odorisio
Mapa de Thomas Merton en California
De camino con Thomas Merton: El itinerario de California en sus propias palabras


PARTE I: LAS CONFERENCIAS DE REDWOODS

MAYO de 1968

1. La conciencia moderna
2. Alienación y mística femenina
3. Mística femenina, consciencia milenaria y conciencia ecológica
4. Aspectos psicológicos de la vida religiosa y karma yoga
5. Los orígenes de la conciencia moderna
6. La conciencia mística en el yoga y la vida en soledad
7. Estadios hindúes de la vida y karma yoga
8. Bhakti yoga y diálogo intermonástico
9. Introducción al sufismo
10. Ritual y prácticas de los nativos americanos
11. Espiritualidad sufí: entrega y misericordia
12. La interpretación de los sueños, la espiritualidad sufí y la
inclusividad religiosa

OCTUBRE 1968

13. Vida en oración
14. Diálogo de apertura
15. Oración, libertad y duda
16. Discusión: zen y no violencia
17. Discusión: pentecostalismo, poesía y oración
18. Oración y tiempo
19. Diálogo final: política y oración

PARTE II: LAS CARTAS

20. La correspondencia entre Thomas Merton y Myriam Dardenne
21. Cartas a compañeros monásticos, conocidos y amigos

APÉNDICE

22. Cuatro días con Merton, por Gracie M. Jones

Posfacio, por Fernando Beltrán Llavador
Agradecimientos
Permisos
Índice onomástico y analítico

SOBRE LA EDICIÓN

Diseño de cubierta: Brice Hemmer
© 2024 por David M. Odorisio
Publicado por Liturgical Press, Collegeville, Minnesota. Todos los derechos reservados. Excepto breves citas en reseñas, ninguna parte de este libro puede ser utilizada o reproducida de ninguna manera sin permiso escrito de Liturgical Press, Saint John’s Abbey, PO Box 7500, Collegeville, MN 56321-7500. Impreso en los Estados Unidos de América.

Library of Congress Cataloging-in-Publication

Odorisio, David M., editor.
Thomas Merton in California : the Redwoods conferences and letters / editado por David M. Odorisio.
Descripción: Collegeville, Minnesota: Liturgical Press, [2024] | Incluye índice |
Resumen: “En octubre y mayo de 1968, Thomas Merton ofreció dos extensas conferencias en la abadía de Nuestra Señora de Redwoods, una comunidad de religiosas cistercienses en el norte de California. Recoge cartas previamente inéditas y más de veintiséis horas de charlas.

— Proporcionado por la editorial.

Identifiers: LCCN 2023030058 (print) | LCCN 2023030059 (ebook) | ISBN
9798400800313 (trade paperback) | ISBN 9798400800320 (epub) | ISBN
9798400800337 (pdf)
Subjects: LCSH: Merton, Thomas, 1915-1968. | BISAC: RELIGION /
Monasticism | RELIGION / Christianity / Catholic
Classification: LCC BX4705.M542 T497 2024 (print) | LCC BX4705.M542
(ebook) | DDC 271/.12502—dc23/eng/20231017
LC record available at https://lccn.loc.gov/2023030058
LC ebook record available at https://lccn.loc.gov/2023030059


A las hermanas del monasterio de Redwoods
—pasado, presente y futuro—
y
para Jonathan
«Id en paz, porque nos hemos jurado amistad en nombre del Señor»
1 Samuel 20,42


PREFACIO

Thomas Merton en Redwoods

No es infrecuente que los lectores de las obras de Thomas Merton manifiesten una sensación de conexión personal con sus escritos, como si les hablara directamente. Este era uno de sus dones como escritor: escribir con tal intimidad, franqueza y honestidad que los lectores sentían el desafío de considerar su propia implicación personal con las cuestiones que planteaba en su obra, y se veían movidos a preguntarse qué podría estar en juego para ellos. A mí me ha ocurrido lo mismo. Al leer esta extraordinaria colección de conferencias pronunciadas en el monasterio de Redwoods en 1968, volví a sentir la fuerza de su voz inconfundible y su capacidad para articular con claridad y hondura algunas de las cuestiones espirituales y existenciales más urgentes. Para mí, personalmente, estas charlas también resuenan con una sensación de reconocimiento que nace de una profunda familiaridad con este lugar y una larga amistad con esta comunidad monástica en particular.

Visité por primera vez el monasterio de Redwoods en el otoño de 1977, menos de diez años después de la estancia de Merton allí. Recién graduado de la universidad, estaba ávido de una experiencia de silencio y soledad que, hasta entonces, había encontrado sobre todo en las páginas de los libros. Algunos de estos fueron escritos por Thomas Merton, —La montaña de los siete círculos, Nuevas semillas de contemplación y Conjeturas de un espectador culpable, entre otros—, cuya obra había devorado como estudiante en la Universidad de California, en Santa Cruz. Con los escritos de Merton, y otros más antiguos de la tradición contemplativa hacia los que Merton me había orientado —incluidos los Dichos de los padres y madres del desierto, las Revelaciones de Juliana de Norwich y El castillo interior de Teresa de Ávila— me percaté de una dimensión profunda de la experiencia espiritual cristiana que en aquel momento desconocía casi por completo, pero que posteriormente se convirtió en una parte importante y necesaria de mi propio camino vital.

Sin embargo, entonces tenía poca idea del contexto real de estos escritos y en concreto, del contexto monástico. ¿Qué era exactamente un monasterio? ¿Y qué significaba vivir en una comunidad monástica? En aquel momento, no podía decirlo. Y aunque los escritos de Merton sugerían que la vida y la cultura monástica cristiana estaban muy vivas en los Estados Unidos de mediados del siglo XX, me sorprendió saber que era posible visitar y alojarse en un monasterio, o que había un monasterio cisterciense a poca distancia de donde vivía, en coche (o haciendo autostop). Decidí que tenía que verlo con mis propios ojos. Así que ese otoño emprendí una peregrinación monástica de seis meses que me llevaría a casas monacales de Gales, Francia, Italia, Grecia y, finalmente, al monasterio de Santa Catalina, al pie del monte Sinaí. Buscaba algo, algo que no podía nombrar fácilmente, pero que me impulsaba a entrar y pasar tiempo en el silencio y la quietud de estos espacios monásticos.

El monasterio de Redwoods fue el primer lugar en el que me detuve. El hecho de estar allí se debió en gran parte a un escrito notable que había encontrado un par de años antes. Se titulaba «Thomas Merton, hombre de oración», de David Steindl-Rast; formaba parte de una colección de ensayos sobre Merton, editada por el hermano Patrick Hart. La mayoría de estos ensayos ofrecían perspectivas sobre las contribuciones de Merton a una u otra dimensión del pensamiento y la práctica monástica. El ensayo de Steindl-Rast era diferente. Se trataba en gran parte de la transcripción de una charla sobre la oración que Merton había dado a la comunidad del monasterio de Redwoods en 1968. Era fascinante: clara, informal, fluida y marcada por una sensación de sencillez, libertad y apertura que me resultaron conmovedoras.

Debí haber percibido de alguna manera que eran notas de una charla. Pero en aquel momento lo que más me impresionó fue la atmósfera de esas páginas, impregnada de silencio y atención, escéptica ante el valor de las palabras, regresando siempre a la realidad fundamental de la oración. «Nada de lo que nadie diga será tan importante», señala Merton al principio. «Lo que de verdad importa es la oración. La oración en sí misma. Si se quiere una vida de oración, el modo de lograrlo es orar». Recuerdo haber sonreído al leer esto. Sonreí con un pequeño estremecimiento ante lo poco que había incorporado la verdad de esta idea a mi propia vida. Después de todo, yo no buscaba una teoría de la oración, ni una guía para rezar. No, quería una vida de oración. Y, sin embargo, gran parte de mi comportamiento, de mis lecturas, pensamientos y reflexiones, solo servían para alejarme de lo que de verdad anhelaba. He aquí un recordatorio, a la vez tranquilizador y desafiante, de la llamada a volver siempre a lo que los Evangelios llaman «la única cosa necesaria». No como algo por lo que esforzarse o construir, sino simplemente para cobrar conciencia de ello. «En la oración descubrimos lo que ya tenemos», observaba él. «Empiezas donde estás y profundizas en lo que ya tienes y te das cuenta de que ya estás ahí. Ya lo tenemos todo; pero no lo sabemos y no lo experimentamos. Todo nos ha sido dado en Cristo. Todo lo que necesitamos es experimentar lo que ya poseemos».

Ya lo tenemos todo. Estas palabras resuenan hoy con tanta fuerza y verdad como lo hicieron en 1968, cuando Merton las pronunció en medio de aquel círculo amistoso del monasterio de Redwoods. Sugieren algo sobre la importancia y la belleza de esta nueva colección de las charlas que Merton dio en el monasterio de Redwoods aquel año, transcritas y editadas con gran habilidad y cuidado por David Odorisio, a disposición nuestra aquí por primera vez. Quizá hay quien se pregunte si necesitamos otra publicación póstuma de los escritos de Thomas Merton más de cincuenta años después de su muerte; pero hay algo distintivo y convincente en estas charlas que hace que merezcan una detenida y cuidadosa atención por parte nuestra.

Una razón para ello, quizá la más inmediata, es que estas charlas nos permiten comprender el pensamiento de Merton durante el último año de su vida. Uno de los primeros y más tempranos atisbos que tuvimos de este periodo de la vida de Merton llegó con la publicación de Woods, Shore, Desert, 1 la escueta y cincelada selección de los diarios de Merton, publicada en 1982, que recogía el sentido de lo que supuso para él viajar a California y Nuevo México en 1968, incluyendo lo que pensaba acerca de la posibilidad de establecerse en algún lugar del Oeste a su regreso de Asia. En 1998, con la publicación del séptimo volumen de sus diarios, The Other Side of the Mountain 2 [El otro lado de la montaña], surgió una imagen más completa de este periodo de su vida que ayudó a situar su estancia en California como un punto crucial entre los largos años como monje de la abadía de Getsemaní, en Kentucky, y su viaje final a Asia.

Con la aparición de esta recopilación de las charlas de Merton en Redwoods, tenemos la oportunidad de adentrarnos aún más en este importante capítulo final de su vida y de acceder, de un modo que se diferencia mucho de la forma literaria de sus diarios o de su correspondencia durante esta época, a la forma en que se desplegaba su pensamiento en «tiempo real» en una coyuntura crítica de su vida. Aquí, en este rico e íntimo espacio de diálogo, pensaba a menudo en voz alta, poniendo a prueba sus ideas, en un empeño por comprender mejor lo que podría significar desnudar el pensamiento y la práctica contemplativa para llegar a lo esencial. Además, estaba claro que disfrutaba mucho.

Sin duda, los lectores percibirán esta sensación gozosa en casi todas las páginas; la palabra «risas», que el editor introduce entre corchetes, aparece con frecuencia y es solo un indicio de la frecuencia con la que el curso de la conversación se ralentizaba o incluso se detenía para que las personas reunidas pudieran sintonizar con el humor, intencionado o no, provocado por las observaciones de Merton, a menudo irónicas o ingeniosas, espontáneas. Las charlas abordan una serie de temas serios: el estado de la vida monástica contemporánea; la oración, la libertad y la duda; la alienación; la conciencia mística; el diálogo interreligioso, y las preocupaciones sociales y medioambientales. Sin embargo, el clima de las conversaciones era abierto, informal, exploratorio y tenía un marcado sentido lúdico. Esto también significa que a menudo el discurso carece de sistematización y resulta en ocasiones difuso, a la vez que preserva el encanto y la incoherencia de las conversaciones originales, si bien a veces requiere paciencia y comprensión por parte del lector. Con todo, me atrevería a sugerir que gran parte del valor de estas conversaciones y del pensamiento que emerge de ellas radica en ese ambiente lúdico y abierto de indagación.

Aun así, cabe preguntarse qué se puede ganar escuchando estas conversaciones entre monjes, monjas y otras personas reunidas en ese espacio monástico en un momento concreto de la primavera y el otoño de 1968. ¿Hay algo original o importante en el contenido de las conversaciones? ¿Qué podemos aprender en el año 20[24] de reflexiones incardinadas en los supuestos intelectuales y culturales específicos de la década de 1960, por ejemplo, sobre «La conciencia moderna» o sobre «Los orígenes de la conciencia moderna»? O más bien, ¿cuánto de este material podemos esperar de modo razonable que siga teniendo algo que decirnos en este momento? Creo que es una pregunta justa, y que yo mismo me hice de vez en cuando mientras leía este manuscrito. Es posible que otros lectores también se la planteen. No obstante, como sugieren mis primeros comentarios sobre la charla titulada «La vida en oración», muchas de las cuestiones planteadas en estas conferencias siguen muy vivas hoy para nosotros. Y la honestidad y profundidad con la que Merton y sus interlocutores abordan estas cuestiones es a la vez refrescante y alentadora.

A menudo, mientras leía esta obra, me sentí cautivado, como tantas otras veces al leer la obra de Merton, por su estilo de pensamiento profundamente personal e inimitable, por la libertad, apertura y espontaneidad que siempre han caracterizado sus mejores escritos y que aquí se muestran de forma tan vívida. No hace falta estar de acuerdo con las ideas concretas que expone en una u otra conferencia para apreciar el cuidado, la atención y el sentido de honestidad espiritual que aporta a su investigación. Estos han sido siempre rasgos distintivos de los mejores escritos y pensamientos de Thomas Merton. En este caso, se ven realzados y tienen un calado más hondo por el estilo conversacional de estas conferencias; a menudo responde a preguntas concretas de los asistentes a estos encuentros, y estas casi siempre surgen de un sentimiento de auténtica urgencia existencial.

También lo hacen las respuestas de Merton. En este sentido, la profundidad del «espíritu» en los intercambios entre Merton y sus interlocutores a menudo tiene tanto valor como las ideas concretas que expresan. Al escuchar estos intercambios en un momento histórico en el que las diferencias políticas y culturales (en la sociedad y en la Iglesia) hacen que a veces nos parezca casi imposible comunicarnos de manera abierta y con un espíritu de diálogo genuino, estas conferencias sirven para recordarnos lo que todavía es posible.

Más de cincuenta años después, la comunidad del monasterio de Redwoods continúa recorriendo el antiguo camino monástico cristiano con hondura e integridad. Merton percibió estas cualidades durante el tiempo que pasó con la comunidad en 1968 y lo comentó repetidamente. Algo de estas conferencias que también merece la pena resaltar y apreciar es que no solo pertenecen a un tiempo sino también a un lugar muy concreto. Estas conferencias no tuvieron lugar en cualquier parte, sino aquí, en este monasterio cisterciense femenino, fundado a principios de los años sesenta por hermanas procedentes de Bélgica, y que poco a poco, con el paso del tiempo, se fue injertando culturalmente entre los bosques de secuoyas del norte de California.

Resulta difícil pasar por alto el espíritu del lugar en estas conferencias. Su luz resplandece de muchas maneras: en la singularidad ecológica de su emplazamiento, que a menudo influye en el estado de ánimo y el sentimiento de la conversación que transcurren en él; en la valentía y la apertura de esta vibrante comunidad de mujeres que desempeñan un papel esencial en el trabajo de indagación compartida; y en el silencio que lo fundamenta e infunde todo. Como lectores y buscadores, se nos invita a escuchar con atención el silencio, las palabras y pensamientos que surgen de él y las profundas corrientes del Espíritu de los que está transido. Tal vez podamos añadir nuestras propias voces a una conversación que, después de todo, sigue dándose entre nosotros.

DOUGLAS E. CHRISTIE
Los Ángeles, California

NOTAS:
  1. Ese periodo quedó plasmado gráficamente por el propio Thomas MERTON a través de sus fotografías, en el capítulo «Bosques, Costa, Desierto, Oriente: El peregrino», Paul M. PEARSON, ed., Contemplando el Paraíso: Las fotografías de Thomas Merton, Mensajero, Bilbao 2021, 165-216 [N. de los T.].
  2. Thomas MERTON, The Other Side of the Mountain: The End of a Journey. The Journals of Thomas Merton (1967-1968) edited by Patrick Hart, vol. 7, Harper Collins, New York 1999. Aunque inédito en español, el libro de Thomas MERTON, Diarios (1939-1968), Mensajero, Bilbao 2014, recoge una selección de los siete volúmenes que comprenden sus diarios completos [N. de los T.].

POSFACIO

¿Qué se puede decir al final de un libro singular como este, al que acompaña un rico aparato de citas, y que ya viene precedido de una presentación, un prólogo, un prefacio y una introducción? En la nueva edición del relato autobiográfico de Thomas Merton, La montaña de los siete círculos poníamos el acento en la evolución que habría de experimentar Thomas Merton en los veinte años que siguieron a su primera publicación en lengua inglesa, en el año 1948 1.

Podría parecer que nos encontramos esta vez al término de ese itinerario, y que estas conferencias son, definitivamente, el legado de Merton, la siembra final de sus semillas y su última palabra poco antes de su muerte en Asia; felizmente desentrañada y puesta al alcance de todos, sí, pero conclusa. Quizás, no obstante, se trate de otra cosa bien distinta. Allí también calificábamos aquella obra «primera», esto es, a la vez fundacional y primordial, como un «clásico», transcurridos setenta y cinco años desde que viera la luz por primera vez 2. Ahora bien, leer a Merton como un clásico no significa que sus obras sean artefactos culturales osificados, objetos de culto, o piezas de museo sino, por el contrario, que actúan, hoy como ayer, como un espejo que refleja con nitidez el escenario de nuestro mundo personal y social, al tiempo que lo interpela.

Encuentros en California (1968) permite leer a Merton desde una triple perspectiva: intratextual, a la luz de sus obras anteriores sobre las que también este volumen ofrece nuevas claves de lectura; intertextual, en diálogo con la plétora de textos, incluyendo las creaciones de artistas plásticos, músicos de jazz o cantantes de folk, que Merton leyó, escuchó o contempló o sobre los que reflexionó y meditó; y contextual, situándolos en el marco espacial y temporal en el que se celebraron las conferencias y discusiones que lo componen. Esta última asoma en sus conversaciones sobre las formas contemporáneas de alienación, la preocupación medioambiental, los conflictos raciales, los avances científicos, la cultura norteamericana y la europea, o las exploraciones incipientes, en los ámbitos de la psicología y de la religión, hacia una nueva conciencia. Las tres abren horizontes vastos y de hondura, y están entreveradas, pero todas requieren
nuestro concurso y solicitan una actitud de especial cualidad, en resonancia con la que él mismo mostró en la preparación de esos encuentros y que se trasluce en el momento de compartirlas. «Los contemplativos son como árboles que limpian el aire por la noche», les dice a sus hermanas.

Como ni aquel primer relato autobiográfico ni los textos que le siguieron, y tampoco las transcripciones de estos encuentros pueden leerse fuera de las circunstancias en las que se fraguaron ayer, o de las nuestras hoy, la manera de acercarse a Merton está cambiando. Ese cambio es necesario, saludable y bienvenido, pero también es exigente.

Ya no se trata solo de estudiar a Merton sino de entablar una conversación con él, semejante a la que él mismo sostuvo con sus coetáneos. A ese respecto, cabe decir que Merton había preparado una edición de su diario entre el 1 de enero de 1964 y el 6 de septiembre de 1965 que subtituló, de manera significativa, un voto de conversación 3, una derivación del voto de conversión monástica, conversio morum, que entraña un compromiso de transformación interna 4. Esa constante en su vida fue el centro de su preocupación y el núcleo de su mensaje, que hizo explícito en su última intervención pública en Asia, vinculada a la pureza de corazón a la que se refirió Casiano en su primera colación, sobre la purita cordis 5. Años antes, en su obra Vida y santidad, de la que extrae fragmentos Gracie Jones al final de la rememoración de sus «Cuatro días con Merton», este había escrito: «No nos “convertimos” una única vez en nuestra vida, sino muchas veces, y esta interminable serie de grandes y pequeñas “conversiones”, de revoluciones interiores, desemboca finalmente en nuestra transformación en Cristo» 6.

En el caso de Merton la vinculación, pues, entre conversión y conversación no fue tenue ni fortuita. Él había dedicado ese libro, «in memoriam», a Louis Massignon (1883-1962), de quien tomó su expresión «le point vierge», el centro de nuestra nada, en la que Dios nos colma con su misericordia, que hunde sus raíces en el sufismo de al-Hallaj 7. Merton cifra su despertar de un sueño de separación en su vivencia de ese punto. Tras atravesar aquel espejismo reconoce la pura gloria de Dios brillando como un sol, de manera incondicionada, en sus semejantes y en él mismo, mientras caminaba por una calle bulliciosa de Louisville 8.

Merton había descubierto asombrosas concomitancias entre ese «punto virgen» y «la chispa del alma» o scintilla animae descrita por Eckhart, así como la similitud entre esta última y la vacuidad del patriarca chino del zen, Hui-neng. En esta última encuentra, de manera específica, «una sorprendente estructura trinitaria que nos recuerda todo lo que es más característico en las formas más elevadas de la contemplación cristiana» 9.

Lo que resulta alentador es esa convivialidad que, con «mente de niño, la única que vale la pena tener» 10, es capaz de celebrar lo más genuino que nos une, y sirve, con un trabajo a conciencia y de conciencia, pero sin violencia, para romper barreras divisorias y superar etiquetas reduccionistas, acabando con falsos istmos y egotismos.

Al leer esta obra, en su origen destinada al oído antes que al ojo, asoma la invitación de san Benito a los monjes: «inclina el oído de tu corazón». Y al hacerlo, «con oído atento», escuchamos su exhortación a «levantarnos del sueño» (Rom 13, 11). Pero en Merton el eco de la Palabra, que es Una, nos llega en múltiples reverberaciones a través del «viñedo del texto», cuando nos acercamos, con cierta inocencia, a «la lectura como camino hacia la sabiduría», para utilizar la imagen de Iván Illich en su comentario al Didascalicon de Hugo de San Víctor, «el primer libro que se escribió sobre el arte de la lectura».11

Desde esa modalidad de visión inmediata, que no tiene objeto, lo que Merton experimentó mientras hacía la ronda nocturna de vigilancia contra el fuego en una noche calurosa de verano, en ese episodio referido en la «Presentación», fue el amor sin límites de Dios en el centro de ese punto de pura pobreza: «misericordia dentro de la misericordia, dentro de la misericordia» 12. Y si ese fue el eje de su conversión, la fruición de esta se desbordó en una mirada que participa de la misma compasión con la que él fue mirado, proyectada ahora a sus semejantes, amistándolos en Dios y en conversación de corazón a corazón con ellos. Es esta una siempre nueva y regeneradora relación, limpia, franca, libre y emancipadora: una comunicación creativa que es comunión.

La de Merton fue y sigue siendo una obra abierta, su conversación continua, y su invitación a formar parte de ella, universal. No se trata tanto de pensar qué diría Merton hoy, sino de hacernos eco de su propuesta: «mantener abierto el camino que permita al ser humano tecnologizado y moderno recobrar la integridad de su yo interior más profundo» 13.

Quizás el mejor regalo de estas páginas es que, ante todo, permiten conocer, como lo hizo Gracie Jones, «no al Thomas Merton sacerdote y monje trapense ni al Thomas Merton escritor y poeta, sino a Thomas Merton, mi hermano en Cristo Jesús».

Durante su ronda nocturna, actuando como vigilante contra el fuego, Merton asciende por la escalera que lleva al campanario, comprueba con alivio que no hay fuego en la torre y entonces, «la puerta se abre sobre un inmenso océano de oscuridad y de oración». Y se pregunta: «¿Llegará de ese modo el momento de mi muerte?» 14 La pregunta sigue sonando, fundida con el tañido de esas campanas.

Merton dijo acerca de los padres del desierto que «buscaban un camino hacia Dios que no estaba cartografiado, sino que había sido elegido libremente, no heredado de otros que lo hubiesen registrado de antemano». Y así como él afirmaba que «necesitamos aprender de estos hombres del siglo IV cómo ignorar prejuicios, desafiar coacciones y adentrarnos en lo desconocido» 15, también nosotros hoy seguimos necesitando, junto a aquellos abbas y ammas, vigilantes con «ojos llenos de fe en la noche» como Merton 16.

FERNANDO BELTRÁN LLAVADOR
31 de enero de 2024


NOTAS:
  1. Fernando BELTRÁN LLAVADOR, «Posfacio», Thomas MERTON, La montaña de los siete círculos, op. cit., 463-467.
  2. Francisco RAFAEL DE PASCUAL, OCSO, «Presentación», ibid., XIII.
  3. Fragmentos significativos del mismo se encuentran en Thomas MERTON, Diarios (1939-1968), op. cit., 214-258.
  4. Ver la voz «Conversión», William H. SHANNON, Christine M. BOCHEN, y Patrick F. O’CONNELL, Diccionario de Thomas Merton, op. cit., 120.
  5. Thomas MERTON, Diario de Asia, op. cit., 301.
  6. Thomas MERTON, Vida y santidad, op. cit., 136.
  7. Louis MASSIGNON, La pasión de Hallaj: mártir místico del islam, op. cit.
  8. Thomas MERTON, Conjeturas de un espectador culpable, op. cit., 190-193.
  9. Thomas MERTON, Místicos y maestros zen, op. cit., 49.
  10. Como Merton le había deseado que preservara al diplomático católico y estudioso del Tao, John Wu, en una carta el 1 de abril de 1961.Véase Fiona GARDNER, The Only Mind Worth Having: Thomas Merton and the Child Mind, Cascade Books, Eugene, OR 2015, 62.
  11. Iván ILLICH, En el viñedo del texto. Etología de la lectura: un comentario al “Didascalicon" de Hugo de San Víctor, Fondo de Cultura, México 2002, 12.
  12. Thomas MERTON, El signo de Jonás (Diarios 1946-1952), op. cit., 405.
  13. Thomas MERTON, Diario de Asia, op. cit., 278.
  14. Thomas MERTON, El signo de Jonás (Diarios 1946-1952), op. cit., 403.
  15. Thomas MERTON, La sabiduría del desierto, Biblioteca de Autores Cristianos, Madrid 2018,14, 37.
  16. Thomas MERTON, The Collected Poems of Thomas Merton, op. cit., 712.

FUENTE:
Francisco R. de Pascual, ocso
Abadía Cisterciense de Viaceli
CÓBRECES (Cantabria)


AGENDA – PRÓXIMOS ACTOS

HOY MIÉRCOLES 19 JUNIO 2024

19 junio 2024

Merienda solidaria interreligiosa - Fiesta del cordero
Casa Turca. Calle del Consejo de ciento, 295

20'00 horas

Concierto de Tres Culturas
Real Basílica de San Francisco el Grande, c/ San Buenaventura nº 1
MADRID

20'30 horas

Oración al estilo de Taizé
Parroquia El Cristo del Mercado, c/ José Zorrilla, 125
SEGOVIA

20'30 horas

Oración Común
Parroquia de la Purísima Concepción, Vía Massagué, 21
SABADELL (Barcelona)

20 junio 2024 – 9'00 horas

Encuentro Virtual Día Mundial de los Refugiados
“Acoger al otro: fortalecer la promoción y la acción para los refugiados y otras comunidades desplazadas por la fuerza ”
Religiones por la Paz
MUNDO
ON LINE

21 junio 2024 – 20’00 horas

Oración Interconfesional
Iglesia Luterana, paseo Castellana, 6
MADRID

21 junio 2024 – 21’00 horas

Oración de la Cruz (Taizé)
Parroquia de Sant Marcel, c/ Petrarca 52
HORTA-BARCELONA

21 junio 2024 – 21’00 horas

Oración común al estilo de Taizé
Iglesia de Nuestra Señora de Gracia y San José (Els Josepets), plaza Lesseps, 25
BARCELONA

22 junio 2024 - 17’00 horas

Encuentro de Oración por la Unidad
Parroquia de la Asunción, Gavilán 1137
BUENOS AIRES (Argentina)

22 junio 2024 - 20’30 horas

Oración de la noche desde Taizé
Retransmitida en directo en redes desde Taizé
TAIZÉ (Francia)
ON LINE

23 junio 2024
Pentecostés – Iglesia Ortodoxa

23 junio 2024 - 17’30 horas

Espacio Ecuménico
Parroquia Asunción, Franklin, 2173 - FLORES
BUENOS AIRES (Argentina)

24 junio 2024
Nacimiento de San Juan Bautista


24 junio 2024 – 21’00 horas

Oración de Taizé
Centro Padre Claret, c/ Joan Maragall, 23
GIRONA

24 junio 2024 – 21’00 horas

Oración Común (Taizé)
Iglesia Catedral de San Lorenzo, plaza de la Villa, s/n
SAN FELIÚ DE LLOBREGAT (Barcelona)

25 junio 2024

Oración común
Capilla de la parroquia de María Auxiliadora, Pso. San Juan Bosco, 70
BARCELONA

25 junio 2024 – 20’45 horas

Oración de Taizé
Parroquia Mare de Déu dels Dolors, c/ Begur, 10
BARCELONA

25 junio 2024 – 21’00 horas

Oración Taizé
Parroquia de Santa María, c/ Rectoría, 1
VILANOVA I LA GELTRÚ (Barcelona)

26 junio 2024 – 20’30 horas

Oración al estilo Taizé
Parroquia El Cristo del Mercado, c/ José Zorrilla, 125
SEGOVIA

26 junio 2024 – 20’30 horas

Oración Común
Parroquia de la Purísima Concepción, Vía Massagué, 21
SABADELL (Barcelona)

28 junio 2024 – 20’30 horas

Oración con los salmos
Iglesia parroquial de San Pedro (La Sede de Égara), plaza del Rector Homs, s/n.
TERRASSA (Barcelona)

28 junio 2024 – 21’00 horas

Oración de la Cruz (Taizé)
Parroquia de Sant Marcel, c/ Petrarca 52
HORTA-BARCELONA

28 junio 2024 – 21’00 horas

Oración común al estilo de Taizé
Iglesia de Nuestra Señora de Gracia y San José (Els Josepets), plaza Lesseps, 25
BARCELONA

29 junio 2024
Festividad de San Pedro y San Pablo, apóstoles

29 junio 2024 - 20’30 horas

Oración de la noche desde Taizé
Retransmitida en directo en redes desde Taizé
TAIZÉ (Francia)
ON LINE

29 junio 2024 – 21’30 horas

Oración Taizé
Convento de las Vedrunes de Caldes de Malavella, c/ Doctor Furest
CALDES DE MALAVELLA (Girona)

30 junio 2024
Festividad de Todos los Santos – Iglesia Ortodoxa


30 junio – 4 julio 2024

Enc
uentro Ecuménico “El Espinar”
Casa Fuentenueva. Hermanos Maristas. Carretera Guadarrama, km 5,5
SAN LORENZO DEL ESCORIAL (Madrid)

30 junio 2024 – 18’30 horas

Oración común al estilo de Taizé
Parroquia de Santa María. c/ de Joan Puig, 3.
RUBÍ (Barcelona)




No hay comentarios:

Publicar un comentario