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Un espacio propuesto por EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO

jueves, 22 de agosto de 2019

HUMANIDAD E IGUALDAD EN LA CREACIÓN DE DIOS

La Semana Mundial por la Paz destaca la humanidad y la igualdad


Con el tema “Humanidad e igualdad en la Creación de Dios”, se alienta a los creyentes de todo el mundo a dar testimonio común reuniéndose para orar y participar en actos de apoyo durante la Semana Mundial por la Paz en Palestina e Israel. Esta manifestación anual de solidaridad y esperanza se lleva a cabo del 15 al 22 de septiembre y, como es habitual, la semana incluye el Día Internacional de la Paz, el 21 de septiembre.

“La situación en Palestina e Israel no ha cambiado y la gente sigue sufriendo. Eso tiene consecuencias sobre el futuro de cada persona en la región, niega la dignidad humana de todos por igual, así como en todos los aspectos de la Creación de Dios. Aunque todos hemos sido creados a imagen de Dios, la ocupación militar y sus prácticas discriminatorias constituyen un obstáculo para la plenitud de la vida de todos en la Creación de Dios”, dice el secretario general del CMI, el Rev. Dr. Olav Fykse Tveit, quien, durante la Semana Mundial por la Paz, espera ver a los creyentes unidos en servicios de culto, eventos educativos y actos de apoyo por una paz justa y sostenible, tanto para palestinos como para israelíes.

El tema de este año ha sido elegido para rechazar el racismo, la xenofobia, la estigmatización, la exclusión impulsada por las políticas populistas y otras tendencias crecientes. El objetivo es estimular y reavivar el interés por la dignidad humana de todas las personas por igual, independientemente de las diferencias étnicas, religiosas o políticas, y por la lucha en favor de la realización de los derechos humanos iguales e inalienables de todas las personas.

“El tema es de especial actualidad en el contexto del conflicto palestino-israelí y de la búsqueda infructuosa de una paz sostenible basada en el reconocimiento de los derechos humanos inalienables de todos los pueblos de la región”.

Nota conceptual para la Semana Mundial por la Paz en Palestina e Israel 2019

Contexto

Cada año, durante la semana del Día Internacional de la Paz (21 de septiembre), se alienta a iglesias, organizaciones asociadas, congregaciones y creyentes a participar en servicios de culto, eventos educativos y actos de apoyo por una paz justa y sostenible, tanto para palestinos como para israelíes.

Fecha

Del 15 al 22 de septiembre de 2019

Tema

“Humanidad e igualdad en la Creación de Dios”

El conflicto y las injusticias persistentes en Palestina e Israel han creado víctimas en todas las comunidades. Esta situación tiene consecuencias en el futuro de cada persona de la región, niega la dignidad humana de todos por igual, así como en todos los aspectos de la Creación de Dios. Aunque todos hemos sido creados a imagen de Dios, la ocupación militar, sus prácticas discriminatorias y sus efectos sobre comunidades enteras de palestinos constituyen un obstáculo para la plenitud de la vida de todos en la Creación de Dios.

“Al igual que afirmamos el derecho del Estado de Israel a existir y el derecho del pueblo judío a la autodeterminación, afirmamos el mismo derecho del pueblo palestino al ejercicio de sus derechos de autodeterminación en un Estado viable en los territorios ocupados desde 1967, con Jerusalén como ciudad compartida por dos pueblos y tres religiones. Igual que condenamos categóricamente el antisemitismo como pecado contra Dios y contra la humanidad, rechazamos la discriminación, la marginación, el castigo colectivo y la violencia contra el pueblo palestino por motivos étnicos, de raza o de religión por ser también un pecado contra Dios y contra la humanidad”. (Declaración sobre el acompañamiento ecuménico para una paz justa en Palestina e Israel, Comité Ejecutivo del CMI de mayo de 2019).

Este es el llamado del movimiento ecuménico a buscar la paz en la tierra del nacimiento de Cristo, una paz basada en la justicia, en vez de en la violencia, el derramamiento de sangre y la exclusión mutua, o en la imposición continua de la ocupación miliar y el control de todo un pueblo.

Es un tema que debe importar a todos los cristianos y personas de buena voluntad de todas partes del mundo, en un momento en que proliferan el racismo, la xenofobia, la estigmatización y la exclusión impulsada por las políticas populistas. De hecho, a través de este tema, se pretende estimular y reavivar el interés por la dignidad humana de todas las personas por igual, independientemente de las diferencias étnicas, religiosas o políticas, y por la lucha en favor de la realización de los derechos humanos iguales e inalienables de todas las personas.

En el contexto del conflicto palestino-israelí y de la búsqueda infructuosa de una paz sostenible basada en el reconocimiento de los derechos humanos inalienables de todos los pueblos de la región, este tema es de especial actualidad.

Textos bíblicos sugeridos

Gn 1:26-28: Dios creó al hombre a su imagen y semejanza.
Gn 2:15: Dios confirió al hombre el mandato de poner orden en la Creación.
Mc 12:31: Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
Gl 3:28: Ya no hay varón ni mujer; ni esclavo ni libre, ni judío ni griego.
Hch 10:34-35: Entonces Pedro, abriendo su boca, dijo: “De veras, me doy cuenta de que Dios no hace distinción de personas, sino que en toda nación le es acepto el que le teme y obra justicia”.
Lc 4:16-19: El mensaje de la liberación. 
Mc 2:27: El hombre es más importante que la ley. “También les dijo: El sábado fue hecho para el hombre, y no el hombre para el sábado”.
Heb 13:1-3: “Permanezca el amor fraternal. No se olviden de la hospitalidad porque por esta algunos hospedaron ángeles sin saberlo”.

Oración

Todos: Te clamamos en oración, Señor, por nuestras hermanas y hermanos en Palestina e Israel que se encuentran paralizados por la injusticia, el miedo y la violencia. Por aquellos que viven con desconfianza, en lugar de esperanza, y con incertidumbre, en lugar de seguridad.

Celebrante: Anhelamos que tu espíritu santo y vivificador reavive en todos nosotros la esperanza y que mantengamos nuestro compromiso de crear una paz duradera en la Tierra Santa.

T: Allí donde los corazones obstinados están cansados, donde los presos políticos están separados de sus seres queridos, donde las familias desesperadas se han visto obligadas a abandonar sus hogares, donde los niños no pueden ir a la escuela sin arriesgarse a ser víctimas de la violencia, donde los agricultores no pueden cosechar sus cultivos sin exponerse al acoso.

C: Dios, permite que fluyan tu amor y tu poder vivificador; anima, libera y protege a todos tus hijos que luchan para mantener viva la esperanza.

T: Cuando la desolación y la desesperanza cavan una brecha más profunda entre todos nosotros, cuando los jóvenes ven la violencia como la única salida, cuando los padres que luchan por mantener a sus familias se ven obligados a pedir préstamos que no pueden devolver.

C: Dios, nuestro refugio y nuestra fuerza, devuelve la esperanza a quienes sufren la tribulación diaria de la ocupación, y apoya a quienes luchan para hacer frente a la vida cotidiana a ambos lados del conflicto. Guíalos desde la desesperación hasta la esperanza y llena sus corazones con tu luz.

T: Donde imperan las balas, los cuchillos, el gas lacrimógeno y las granadas, donde el odio conduce a la violencia incondicional y donde la desesperación encuentra salida a través de una agresividad sin sentido.

C: Oramos para que todos podamos ver la imagen de Dios en los demás, para que podamos reconocer la humanidad los unos en los otros. Haz que tanto israelíes como palestinos sigan el camino de la no violencia para poner fin a la ocupación, y otorga poder a quienes se atreven a defender la paz.

T: Dios misericordioso, solo tú puedes acabar con la indiferencia mutua y darnos la capacidad de vernos los unos a los otros como seres humanos de carne y hueso. Haz que eso ocurra, sobre todo entre aquellos que tienen el poder de provocar un cambio en la tierra que llamamos santa. Haz que tu espíritu llegue a niños, jóvenes, madres, padres, primeros ministros, prisioneros y militares.

C: Haz que nuestros corazones y mentes se llenen de tu paz, danos la fuerza para trabajar por la paz, y la gracia para inspirar a los demás a vivir una vida de esperanza.

T: Dios de los oprimidos y los expulsados, Señor, tú sanas y restauras a través de Jesucristo. En este día, que debería ser, podría ser y debe llegar a ser, un día de alegría y de verdaderas celebraciones de dos países independientes y vecinos, cree en nuestra capacidad para vivir con alegría y confianza, hasta el día en que Cristo regrese.

C: Amén

Citas para reflexionar 

Las siguientes citas y referencias se ofrecen para inspirar la reflexión sobre el tema Humanidad e igualdad en la Creación de Dios. Es posible basarse en otras citas y referencias como base para la reflexión en grupos bíblicos, grupos de oración, reuniones congregacionales, etc.

Secretario General del CMI, Olav Fykse Tveit 

“Compartimos una humanidad común ante Dios. Esa idea de que cada miembro de la humanidad es una creación valiosa, fruto del acto de amor de Dios, alienta a los cristianos a valorar el carácter sagrado de cada ser humano”.

“La influencia perversa del racismo en el mundo actual nos plantea a todos, sea cual sea nuestra religión, el reto de averiguar qué implica realmente en la práctica amar a todas nuestras hermanas y hermanos humanos, y de luchar para que todos ellos vivan la justicia y la paz en sus vidas cotidianas, tal y como desearíamos para nosotros mismos”.

Comisión de Justicia y Paz de los Ordenados Católicos: nueva visión 2017

“Amplíen su visión y sus corazones. Cambien la situación. Pongan fin a la inmovilidad. Hay espacio suficiente en la tierra para todos nosotros. Todos debemos tener dignidad e igualdad. Sin ocupación ni discriminación. Dos pueblos que conviven y se aman en la manera que elijan. Son capaces de amarse y de crear juntos la paz”.

Oramos por que los corazones que el odio y la violencia han endurecido, y las mentalidades que el poder y el miedo han estrechado se abran a nuevos caminos hacia la paz en los que la dignidad y el valor dados por Dios a cada ser humano puedan ser reconocidos y respetados por igual.

FUENTE


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