Todos juntos
Un espacio propuesto por EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO

jueves, 30 de junio de 2011

PEREGRINACIÓN de la UNIDAD

Astorga 10 de Agosto - Santiago 28 de Agosto


PEREGRINACIÓN DE LA UNIDAD: SANTIAGO 2.011 - COMUNIÓN QUE CAMINA  


A un mes y pocos días de comenzar a caminar, ya somos ya 14 movimientos espirituales caminando en unidad hacia Santiago de Compostela. Pasa la voz.
¡Crezca y florezca la columna peregrina, la columna de la unidad en la diversidad!
Este verano nos unimos en una corriente colorida, infatigable a la conquista de nuevos horizontes colectivos.
¡Sigamos sumando!

Os ofrecemos el listado de los movimientos adheridos hasta el presente:
  • Arboleda de Gaia
  • Fraternidad Blanca Universal
  • Miyo y el movimiento conchero en España
  • Alianza Universal (Efrén Älvarez)
  • Byakko internacional. España
  • Círculo del Corazón único,
  • Nuria Aragón (Sibila)
  • Amigos de Findhorn en España,
  • Red Galaica de Luz,
  • Humanity’s Team
  • Arte-Paz (Saya)
  • Movimiento 13 Lunas
  • Pro-Ser/Operación Planeta Amor
  • Asociación Alalba
Cada grupo se responsabiliza de un día. A lo largo de esa jornada nos comparte su legado espiritual.
Observaciones de última hora: Nos preguntan a menudo por teléfono si la organización llevará las mochilas. La respuesta es positiva.
Nos preguntan también si es posible participar a título individual. Por supuesto. Tratamos de acercar a los diferentes grupos y movimientos, pero no hay duda de que la unidad en la diversidad la gestamos entre todas y todos.
Toda esta info obra en www.portaldorado.com. Concretamente en estas dos páginas :

http://www.portaldorado.com/in.php?doc=7331
http://www.portaldorado.com/in.php?doc=7480

Fuerte abrazo de la parte del equipo organizador.

martes, 28 de junio de 2011

TESTIMONIO CRISTIANO EN UN MUNDO DE PLURALISMO RELIGIOSO

Recomendaciones sobre la práctica del testimonio

Preámbulo

La misión forma parte del propio ser de la iglesia. Proclamar la palabra de Dios y dar testimonio al mundo es esencial para todos los cristianos. Al mismo tiempo, es necesario seguir los principios evangélicos, en el pleno respeto y amor por todos los seres humanos.

Conscientes de las tensiones entre personas y comunidades de diferentes convicciones religiosas, y de la diversidad de interpretaciones del testimonio cristiano, el Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso (PCDI), el Consejo Mundial de Iglesias (CMI) y, a invitación del CMI, la Alianza Evangélica Mundial (AEM), se reunieron varias veces durante un período de cinco años para reflexionar y elaborar el presente documento en el que se formulan recomendaciones sobre la forma de llevar a la práctica el testimonio cristiano en el mundo. Este documento no pretende ser una declaración teológica sobre misión sino plantear los problemas prácticos asociados al testimonio cristiano en un mundo plurirreligioso.

El objetivo del presente documento es estimular a las iglesias, los consejos de iglesias y los organismos misioneros a reflexionar sobre sus prácticas actuales, y a hacer uso de las recomendaciones que figuran en este documento para formular, si fuera preciso, las directrices que consideren idóneas para su testimonio y misión entre los creyentes de diferentes religiones y entre quienes no profesan ninguna religión. Esperamos que los cristianos en todo el mundo estudien este documento a la luz de sus prácticas a la hora de dar testimonio de su fe en Cristo, de palabra y obra.

Una base para el testimonio cristiano

1. Para los cristianos es un privilegio y una alegría dar razón de la esperanza que está en ellos y hacerlo con “mansedumbre y reverencia” (véase 1 Pedro 3:15).

2. Jesucristo es el testigo supremo (véase Juan 18:37). Dar testimonio cristiano es siempre compartir su testimonio, que adopta la forma de proclamación del Reino, de servicio al prójimo y el don total de sí aunque el acto de darse conduzca a la cruz. De mismo modo que el Padre envió a su Hijo en el poder del Espíritu Santo, los creyentes son enviados en misión para dar testimonio en palabra y obra del amor del Dios trino y uno.

3. El ejemplo y la enseñanza de Jesucristo y de la Iglesia primitiva tienen que guiar la misión cristiana. Durante dos milenios los cristianos han tratado de actuar conforme a Cristo, dando buenas nuevas del Reino de Dios (véase Lucas 4:16-20).

4. El testimonio cristiano en un mundo plural incluye el compromiso de entablar el diálogo con creyentes de religiones y culturas diferentes (véase Hechos 17:22-28).

5. En algunos contextos, vivir y proclamar el evangelio es difícil, tropieza con muchos obstáculos, y hasta puede estar prohibido. Sin embargo, los cristianos han recibido el mandamiento de Cristo de continuar fielmente su testimonio de él en solidaridad unos con otros (véase Mateo 28:19-20; Marcos 16:14-18; Lucas 24:44-48; Juan 20:21; hechos 1:8).

6. Si los cristianos utilizan métodos inadecuados para ejercer su misión, recurriendo a la coacción o a engaños, están traicionando el Evangelio y pueden causar sufrimiento a otros. Por esas desviaciones estamos llamados al arrepentimiento y nos recuerdan la necesidad de la gracia sin fin de Dios (véase Romanos 3:23).

7. Los cristianos afirman su responsabilidad de dar testimonio de Cristo, pero saben que la conversión es, en última instancia, obra del Espíritu Santo (véase Juan 16:7-9; Hechos 10:44-47). Reconocen que el Espíritu sopla donde quiere en formas que ningún ser humano puede controlar (véase Juan 3:8).

Principios

Los cristianos están llamados a respetar los siguientes principios a la hora de cumplir con el mandamiento de Cristo en forma adecuada, particularmente en los contextos interreligiosos.

1. Actuar en el amor de Dios. Los cristianos creen que Dios es la fuente de todo amor, y, en consecuencia, están llamados en su testimonio a vivir vidas de amor y a amar a sus prójimos como a sí mismos (véase Mateo 22:34-40; Juan 14:15).

2. Imitar a Jesucristo. En todos los aspectos de la vida, y, especialmente en su testimonio, los cristianos están llamados a seguir el ejemplo y las enseñanzas de Jesucristo, a compartir su amor, a glorificar y honrar a Dios el Padre en el poder del Espíritu Santo (véase Juan 20:21-23).

3. Virtudes cristianas. Los cristianos están llamados a actuar con integridad, caridad, compasión y humildad, y a vencer toda arrogancia, condescendencia y actitud de menosprecio (véase Gálatas 5:22).

4. Acciones de servicio y justicia. Los cristianos están llamados a actuar con justicia y a amar misericordia (véase Miqueas 6:8). Además, están llamados a servir a otros y, al hacerlo, a reconocer a Cristo en el más pequeño de sus hermanos y hermanas (véase Mateo 25:45). Las acciones de servicio, como velar por la educación, la atención de salud, los servicios de socorro y las acciones de justicia y defensa de los derechos de otras personas, son parte integrante del testimonio del Evangelio. La explotación de la pobreza y la necesidad no tiene cabida en la acción cristiana. Los cristianos tienen que denunciar toda forma de seducción y abstenerse de caer en ella en sus acciones de servicio, en particular, los incentivos y las recompensas financieras.

5. Discernimiento respecto de los ministerios de curación. Como parte integrante de su testimonio del Evangelio, los cristianos ejercen ministerios de curación. Están llamados a ser capaces de discernimiento al poner en práctica esos ministerios, respetando plenamente la dignidad humana, y velando por que no se exploten la vulnerabilidad de las personas y sus necesidades de curación.

6. Rechazo de la violencia. Los cristianos están llamados a rechazar toda forma de violencia, sea psicológica sea social, en particular el abuso de poder, en su testimonio. También deben rechazar la violencia, la discriminación o la represión por cualesquiera autoridades religiosas o seculares, en particular, la violación o la destrucción de los lugares de culto, los símbolos y los textos sagrados.

7. Libertad de religión y de creencia. La libertad religiosa, incluido el derecho a profesar, practicar, propagar una religión o creencia y a cambiar de religión de forma pública se deriva de la propia dignidad de la persona humana que se arraiga en la creación de todos los seres humanos a imagen y semejanza de Dios (véase Génesis 1:26). Así pues, todos los seres humanos tienen los mismos derechos y responsabilidades. Cuando una religión se instrumentaliza con fines políticos, o cuando existe persecución por razones religiosas, los cristianos están llamados a dar un testimonio profético denunciando esas acciones.

8. Respeto y solidaridad mutuos. Los cristianos están llamados a comprometerse a colaborar con todas las personas en el respeto mutuo, promoviendo juntos la justicia, la paz y el bien común. La cooperación interreligiosa es una dimensión esencial de ese compromiso.

9. Respeto a toda persona. Los cristianos reconocen que el Evangelio interpela y enriquece las culturas. Aunque el Evangelio ponga en tela de juicio algunos aspectos de las culturas, los cristianos están llamados a respetar a todas las personas. Los cristianos también están llamados a discernir los elementos que, en la propia cultura, son impugnados por el Evangelio.

10. Renunciar al falso testimonio. Los cristianos tienen que hablar con sinceridad y respeto; tienen que escuchar para aprender y comprender las creencias y las prácticas de los otros, y se los estimula a reconocer y apreciar la verdad y bondad que contengan. Todo comentario o enfoque crítico deberá hacerse en un espíritu de respeto mutuo, velando por no dar falso testimonio acerca de otras religiones.

11. Velar por el discernimiento personal. Los cristianos tienen que reconocer que cambiar de religión es un paso decisivo que debe estar acompañado de tiempo suficiente para la debida reflexión y preparación, mediante un proceso que garantice la plena libertad personal.

12. Construir relaciones interreligiosas. Los cristianos deben continuar edificando relaciones de respeto y de confianza con creyentes de otras religiones con objeto de facilitar el entendimiento, la reconciliación y la cooperación recíprocos más profundos por el bien común.

Recomendaciones

La Tercera Consulta organizada por el CMI y el PCDI de la Santa Sede en colaboración con la AEM y con la participación de las familias cristianas más numerosas (católica, ortodoxa, protestante, evangélica y pentecostal), elaboró el presente documento en un espíritu de cooperación ecuménica para estudio por las iglesias, los órganos confesionales nacionales y regionales y las organizaciones misioneras, y, en especial, aquellas personas que trabajan en contextos interreligiosos, y recomienda que todos ellos:

1. estudien las cuestiones planteadas en el presente documento y, llegado el caso, formulen directrices destinadas a la práctica del testimonio cristiano que sean aplicables en el respectivo contexto. Siempre que sea posible, esto debería hacerse de forma ecuménica, y en consulta con los representantes de otras religiones.

2. construyan relaciones de respeto y confianza con creyentes de todas las religiones, en particular a nivel institucional entre las iglesias y otras comunidades religiosas, entablando un diálogo interreligioso permanente como parte de su compromiso cristiano. En algunos contextos, en los que años de tensión y de conflicto han creado graves recelos y quebrantamiento de las relaciones de confianza entre las comunidades, el diálogo interreligioso puede aportar nuevas oportunidades para resolver los conflictos, restaurar la justicia, curar las memorias, promover la reconciliación y consolidar la paz. .

3. estimulen a los cristianos a reforzar la propia identidad y fe religiosas, al mismo tiempo que a profundizar en su conocimiento y entendimiento de las otras religiones, y, al hacerlo, a tener en cuenta los puntos de vista de los adeptos de esas religiones. Los cristianos deben evitar la tergiversación de las creencias y prácticas de los creyentes de otras religiones.

4. cooperen con otras comunidades religiosas, participando en acciones interreligiosas de defensa y promoción de la justicia y el bien común y, siempre que sea posible, expresen conjuntamente con esas comunidades su solidaridad para con las personas que se encuentran en situaciones de conflicto.

5. insten a los respectivos gobiernos a velar por el debido amplio respeto de la libertad de religión, reconociendo que en muchos países se impide a las instituciones religiosas y las personas el ejercicio de su misión.

6. oren por sus prójimos y por su bienestar, reconociendo que la oración es una parte esencial de lo que somos y hacemos, así como de la misión cristiana. .

Apéndice: Antecedentes del presente documento

1. En el mundo actual, existe una colaboración cada vez mayor entre cristianos y entre cristianos y creyentes de diferentes religiones. El Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso (PCDI) de la Santa Sede y el Programa de Diálogo y Cooperación Interreligiosos del Consejo Mundial de Iglesias (DCI-CMI) tienen una larga historia de colaboración a ese respecto. Ejemplos de los temas en los que han colaborado en el pasado son: el casamiento interreligioso (1994-1997), la oración interreligiosa (1997-1998), y la religiosidad africana (2000-2004). El presente documento es el resultado de su trabajo en colaboración.

2. Existen cada vez más tensiones interreligiosas en el mundo actual, en particular, violencias y pérdidas de vidas humanas. La política, la economía y otros factores desempeñan una función en esas tensiones. A veces los cristianos también están involucrados, voluntaria o involuntariamente, en esos conflictos, sea como quienes son perseguidos sea como quienes participan en las acciones de violencia. Como respuesta a esta situación, el PCDI y el DCI-CMI decidieron hacer frente a los problemas planteados mediante un proceso conjunto que permitiera formular recomendaciones comunes para la práctica del testimonio cristiano. El CMI-DCI invitó a participar en este proceso a la Alianza Evangélica Mundial (AEM), que aceptó complacida.

3. Inicialmente, se celebraron dos consultas: la primera, en Lariano (Italia), en mayo de 2006, bajo el tema “Evaluación de la realidad”, en la que representantes de diferentes religiones compartieron sus puntos de vista y experiencias sobre la cuestión de la conversión. En la declaración de la consulta se dice: “Afirmamos que, aunque todos y cada uno tenemos el derecho de invitar a otros a ahondar en el entendimiento de la respectiva religión, ese derecho no debe ejercerse violando los derechos y las sensibilidades de los otros. La libertad de religión nos obliga a todos a asumir la responsabilidad no negociable de respetar las religiones de los otros como la nuestra, y nunca denigrarlas, vilipendiarlas o menospreciarlas con el objetivo de afirmar la superioridad de nuestra religión”.

4. La segunda consulta, únicamente entre cristianos, se celebró en Toulouse (Francia), en agosto de 2007, para reflexionar sobre las mismas cuestiones. Se examinaron en profundidad los siguientes temas: “la familia y la comunidad, el respeto de los otros, la economía, el mercado y la competencia, y la violencia y la política. Las cuestiones pastorales y los aspectos misioneros de esos temas sirvieron de base para la reflexión teológica y los principios formulados en el presente documento. Cada tema es importante por propio derecho y merece mayor atención de la que se le da en estas recomendaciones.

5. Los participantes en la Tercera Consulta (entre cristianos) se reunieron en Bangkok (Tailandia), del 25 al 28 de enero de 2011, y se encargaron de finalizar el documento.

Consejo Mundial de Iglesias. Fecha del documento 28 junio 2011

lunes, 27 de junio de 2011

UNA VELA. LUZ

Esta vela junto con otras seis iluminó y acompañó la cruz de los jóvenes en su estancia en Sabiñánigo,

Nos fue regalada al Equipo Ecuménico Sabiñánigo por el Arcipreste de Sabiñánigo D. Fernando Jordán en nombre de las tres parroquias católicas romanas de Sabiñánigo en presencia del Sr. Obispo de la diócesis de Jaca, D. Julián Ruiz, durante la vigilia con la cruz y el Icono de María (Salus populi romani), ambos son regalos del anterior pontífice romano Juan Pablo II a los jóvenes del mundo, celebrada en Sabiñánigo en la noche de este sábado pasado, día 25 de junio.

Se nos regaló como símbolo de la luz que es Cristo, para que nos ilumine, acompañe y guíe en nuestro movimiento y caminar ecuménico.

Las otras seis velas que acompañaron junto a la nuestra a la cruz y el icono durante la vigilia, se entregaron una a cada una de las tres parroquias, otra a Caritas interparroquial, la quinta a la congregación de las Hermanas de la caridad de Santa Ana que atienden y visitan a enfermos en sus hogares y la sexta a las catequistas de Sabiñánigo.

El Equipo Ecuménico Sabiñánigo quiere agradecer este detalle, de esta manera nos encontramos más unidos y hermanados a la iglesia de Cristo que peregrina en Sabiñánigo.

Esta vela presidirá como gesto de hermanamiento entre todos los cristianos nuestra próxima celebración ecuménica.

sábado, 25 de junio de 2011

ECUMENISMO HOY

El objetivo principal del ecumenismo es conseguir que los cristianos de las diferentes denominaciones recuperemos la unidad que Cristo quiso para su Iglesia cuando oraba al Padre diciéndole: “Que todos sean uno, como tu, Padre, estás conmigo y yo contigo; que también ellos estén con nosotros, para que el mundo crea que Tú me enviaste” (Juan 17, 21). Para lograrlo, se trabaja a dos niveles: en el campo doctrinal, buscando recuperar el sentido de la Palabra de Dios en su verdad profunda, y, en el campo social, colaborando en proyectos comunes de promoción y de caridad. Pablo VI consideraba el ecumenismo como “la empresa más misteriosa e importante de su ministerio pontifical”. Y Juan Pablo II, al visitar al Patriarca de Constantinopla el 30 de noviembre de 1979, exclamó: “¿Cómo podemos permanecer todavía separados?”.

Desde hace años se celebra en enero la “Semana de oración por la unidad”, pues la oración de la gente común por la unidad tiene tanta importancia como los debates de los teólogos (P. Couturier).

Es que la unidad auténtica no es fruto estratégico de ningún voluntarismo más o menos político o clerical. Es fruto, ante todo, de la acción del Espíritu Santo sobre nosotros y de nuestra docilidad libre e inteligente a sus dones. En este campo, lo que queda por hacer es enorme, pero los avances de los últimos 40 años han sido también notables, de manera que podemos ser optimistas creyendo que seguimos avanzando en la buena dirección, aunque no sea siempre a gran velocidad, como deseaban aquellos precursores que fueron Congar, Béa y Willebrands, por citar solo a algunos católicos.

Además no es solo cuestión de aproximar instituciones; aunque esto pueda parecernos lo más importante, lo institucional es siempre secundario respecto de la vida teologal propia de la espiritualidad cristiana y esta consistirá siempre en vida de fe, esperanza y caridad. A ese dinamismo hay que retornar mediante una profundización del significado de las Sagradas Escrituras y de la Vida de Jesús, nuestro Maestro, desposado con una sola Esposa, que es la Iglesia. Esta Iglesia vive grandes desafíos en el mundo actual porque, por un lado, se le acusa (a veces con justa razón) de sostener esquemas obsoletos propios del pasado de los que debería desprenderse cuanto antes, y, por otro lado, predica una fe y una esperanza a contrapelo del mundo pagano y materialista en el que navegamos con gran peligro de zozobrar.

Sin embargo, sigue siendo verdad que “es la precariedad de la obra lo que pone al artista en una posición heroica” (Georges Braque). Aquí está, para mí, una gran clave y motivación para perseverar en lo arduo del ideal y del apostolado cristiano. Estamos (todos los cristianos y no solo los católicos) al servicio de quien es más grande que nosotros y por cuya grandeza y en cuyo testimonio deberíamos estar dispuestos a morir. Antaño se daba el testimonio de la fe en la debilidad de la carne ante las fieras, y hoy brindamos el mismo homenaje de aquella misma fe, en la debilidad de unas instituciones eclesiales que ante la gran Historia solo son justificables por la utopía (infinitamente superior a cualquier ideología) que encierran y que, como cristianos de las distintas confesiones, sabemos que se hizo carne en la persona del Señor Jesús.

Por Roberto Fernández. Quito. Ecuador

miércoles, 22 de junio de 2011

Oración breve

Espíritu Santo, Espíritu de amor, tanto si te reconocemos como si no, estás en lo más profundo de todos los seres humanos. Queremos estar atentos a su presencia para descubrir la paz en nuestros corazones. Derrama tu consuelo sobre todos aquellos que sufren en todo el mundo. Ayúdanos a buscar la paz donde hay conflictos o divisiones. En ti, Espíritu Santo, ponemos nuestra esperanza.

Propuesta por la Comunidad de Taizé

domingo, 19 de junio de 2011

Un pensamiento

Desde Huesca, Teresa nos manda el siguiente pensamiento:

RELIGADO A DIOS

Llegará seguramente la hora en que el hombre, en su íntimo y radical fracaso, despierte como de un sueño, encontrándose en Dios y cayendo en la cuenta de que su ateísmo no ha hecho sino estar en Dios. Entonces se encontrará religado a él, no precisamente para huir del mundo, de los demás y de sí mismo, sino al revés, para poder aguantar y sostenerse en el ser. Es que Dios no se manifiesta primariamente como negación, sino como fundamentación, como lo que hace posible existir… El hombre no encuentra a Dios primariamente en la dialéctica de las necesidades y de las indigencias. El hombre encuentra a Dios en la plenitud de su ser y de su vida. Lo demás es tener un triste concepto de Dios.

(Zubiri)

miércoles, 15 de junio de 2011

ENCUENTRO ECUMÉNICO EN IMÁGENES

ASI FUE LA VIGILIA ECUMÉNICA DE PENTECOSTÉS CELEBRADA EN SABIÑÁNIDO EL DÍA 8 JUNIO 2011





D. Jesús Dominguez, delegado de Ecumenismo de la archidiócesis de Zaragoza durante su intervención. Nos quedamos encantados con su presencia, sus palabras y su apoyo.

lunes, 13 de junio de 2011

Primeras comuniones, primeras perversiones

Mes de mayo, de las flores, de María, de las comuniones, de los niños y niñas quienes se sienten príncipes y princesas por un día, pero ¿Cuál es el verdadero sentido? Durante 2-3 años al niño se le prepara, o por lo menos se intenta preparar, para recibir a Jesús por vez primera y aunque este es el principal y único motivo de este día, parece haber sido superado por la parafernalia que organizamos convirtiéndolo en “pequeñas bodas”.

Los niños son y se comportar según les educamos los mayores. En este caso, el verdadero sentido de este día, la gran fiesta es para el niño como resultado del motivo a celebrar, sin embargo esta ha sido manipulada e invadida por los mayores. Ya no es la fiesta del niño por un motivo trascendental, sino del adulto. Con nuestras actitudes los vamos haciendo adultos antes de tiempo, metiendo, sin percibirlo en un mundo de competitividad donde “yo” tengo que ser el mejor al precio que sea.

Llegamos incluso a pedir préstamos para poder afrontar tan excesivamente desmesurados porque mi hija o hijo “tiene que ser el mejor”… sacamos al niño de su espacio para llevarlo al nuestro y no al contrario, que sería lo más lógico, hacernos nosotros como niños… pero ¿En que convertimos este acontecimiento?

Todo ello les lleva a no saber valorar lo que reciben: a Dios que es el mayor regalo y motivo de esta celebración, sin precio económico, pero a eso no le damos la suficiente importancia porque todo lo que no cuesta dinero, no vale. Eso es lo que les estamos enseñando, pero ¿donde queda la moral, los valores, el amor, la entrega?…

Dejemos al niño ser niño, que tome la palabra, eduquémosle en un mundo justo y solidario. La semilla de hoy, será el futuro de mañana que le acompañará el resto de su vida…

Pequeños y mayores somos invitados a la mesa del Señor, todos tenemos un sitio, porque para Jesús no hay exclusión. No dejemos de crecer en amistad con Él, podemos ser partícipes de esa mesa preparada sin olvidar que el centro es Él, no nosotros.

Donde entra Jesús resucitado entra la paz: “se llenaron de paz”, de envío, como les pasó a los discípulos. Donde está Jesús, está la Vida, por eso, ese día no puede ser único, porque ya ha estado en medio de nosotros, por lo tanto, abrámosle las puertas del corazón.
 
Ana Bou. "Un minuto para el encuentro"

domingo, 12 de junio de 2011

PENTECOSTÉS

Domingo 12 junio 2.011: Pentecostés

En Pentecostés o el domingo de Pentecostés se celebra el descenso o venida del Espíritu Santo y el inicio de la actividad de la Iglesia, por ello también se le conoce como la celebración del Espíritu Santo.


Siete semanas son cincuenta días, de ahí el nombre de “Pentecostés” (= cincuenta) que recibió más tarde. La fiesta de Pentecostés es uno de los Domingos más importantes del año, después de la Pascua. En el Antiguo Testamento era la fiesta de la cosecha y, posteriormente, los israelitas, la unieron a la Alianza en el Monte Sinaí, cincuenta días después de la salida de Egipto.

En el calendario cristiano con Pentecostés termina el tiempo pascual de los 50 días. Los cincuenta días pascuales y las fiestas de la Ascensión y Pentecostés, forman una unidad. No son fiestas aisladas de acontecimientos ocurridos en el tiempo, son parte de un solo y único misterio.

Aunque durante mucho tiempo, debido a su importancia, esta fiesta fue llamada por el pueblo segunda Pascua, la liturgia actual de la Iglesia, si bien la mantiene como máxima solemnidad después de la festividad de Pascua, no pretende hacer un paralelo entre ambas, muy por el contrario, busca formar una unidad en donde se destaque Pentecostés como la conclusión de la cincuentena pascual. Vale decir como una fiesta de plenitud y no de inicio.

La fiesta de Pentecostés, es el segundo domingo más importante del año litúrgico en donde los cristianos tienen la oportunidad de vivir intensamente la relación existente entre la Resurrección de Cristo, su Ascensión y la venida del Espíritu Santo.

jueves, 9 de junio de 2011

PREMIO ECUMÉNICO DEL FESTIVAL DE CANNES A PAOLO SORRENTINO

Cannes otorga su premio ecuménico

Lo obtiene "This Must Be the Place" de Paolo Sorrentino
El jurado ecuménico del 64º. Festival de Cannes otorgó el 21 de mayo su premio a la película "This Must Be the Place (Éste debe ser el lugar)", del director italiano Paolo Sorrentino.

"Un drama clásico de una gran riqueza y de una estética rebuscada", escribe el jurado, "que abre con gracia pistas de reflexión graves y profundas".

"A través de Cheyenne, estrella del rock fracasada, Paolo Sorrentino ofrece el viaje interior y la odisea de un hombre en busca de sus raíces judías, de la madurez, de la reconciliación y de la esperanza", añade.

El jurado también concedió dos menciones especiales. La primera, a la película "Le Havre", del finlandés Aki Kaurismäki, aclamada como "una oda a la esperanza, a la solidaridad, a la fraternidad". La segunda, a la película "¿Y ahora dónde vamos?" de la libanesa Nadine Labaki, a la que se le ha reconocido "mucha delicadeza y tacto, suscitando una emoción orientada a la esperanza".

El premio del jurado ecuménico de Cannes existe desde 1974. Un grupo de cristianos comprometidos en el mundo del cine (periodistas, realizadores, profesores) se lo concede a un largometraje del concurso oficial.

lunes, 6 de junio de 2011

VIGILIA ECUMÉNICA DE PENTECOSTÉS

SABIÑÁNIGO 2.011


ESPIRITU SANTO VEN Y UNENOS

Nos reuniremos en oración el
Miércoles 8 de junio a las 20.30 horas
En el Salón del Club Parroquial de Cristo Rey
Contaremos con la presencia de:
D. Jesús Domínguez, delegado de Ecumenismo
de la archidiócesis de Zaragoza
estaremos TODOS JUNTOS
cristianos ortodoxos, protestantes, anglicanos y católicos

TE ESPERAMOS. TU HAS SIDO INVITADO

domingo, 5 de junio de 2011

VIAJE A TAIZÉ

INTERESADOS: ULTIMAS PLAZAS
Desde la parroquia de San lorenzo en Cantabria como cada verano organizamos un viaje a Taize, este año las fechas seran del 16 al 24 de julio. Haremos paradas para recoger  gente en Bilbao y San Sebastian. Si estais interesados no dudeis en contactar con nosotros a traves del correo aqa1906@yahoo.es o en el telefono 650035527.

ASCENSIÓN DEL SEÑOR

No he olvidado la primera vez que subí al campanario de una catedral para poder contemplar desde las alturas el panorama de una famosa ciudad medieval. Desde allí arriba las cosas se veían muy distintas. Las personas eran puntos diminutos que se movían de un lado a otro. Las casas que desde la calle parecen amontonarse unas junto a otras, desde las alturas formaban hileras con formas geométricas. Pero sobre todo me llamaba la atención que desde lo alto el ajetreo y el ritmo de la ciudad aparecía ralentizado; lo coches y las personas se movían con más parsimonia y lo hacían en silencio. El ruido y el ajetreo de la ciudad se había transformado en calma y tranquilidad.

Hace mucho tiempo que no subo a lo alto de un edificio a contemplar la ciudad. Y quizás me viniera bien hacerlo de vez en cuando. Estoy seguro que desde las alturas veré con otros ojos el ajetreo de cada día. No me sentiré tan presionado por las urgencias y las tareas de cada día. Juzgaré de otra manera los roces cotidianos. No me angustiarán tanto las preocupaciones. De vez en cuando viene bien subir a lo alto para desde allí arriba contemplar las cosas desde la distancia y con otra perspectiva.

Los cristianos celebramos hoy la fiesta de la Ascensión. Uno de los sentidos de la celebración de esta fiesta es que Jesús nos propone dirigir nuestra mirada a lo alto; a ese lugar desde donde podemos ver las cosas con otra perspectiva. Jesús marcha al cielo, que bíblicamente no son las nubes sino el lugar en el que Dios vive. Y nos ofrece la posibilidad de ver las cosas desde la perspectiva de Dios.

Desde esa perspectiva puede ser que percibamos que esas aspiraciones que tenemos y en las que invertimos tanto tiempo y energía no merecen la pena. Puede ser que caigamos en la cuenta que a veces descuidamos lo que realmente importa en la vida: nuestras relaciones con los demás. Puede ser que nos haga recapacitar en que estamos descuidando nuestra responsabilidad social, las atenciones que debemos a nuestra familia….

El cielo del que Jesús habla no es una torre de marfil ni son las nubes. El cielo es una dimensión de nuestra vida. Jesús quiere introducirnos hoy en esa dimensión de nuestra vida desde donde podemos ver y juzgar el sentido profundo de lo que hacemos y vivimos. Por eso mirar al cielo no significa desentendernos de la tierra y de sus problemas. Al contrario significa contemplarlos desde otra perspectiva y desde otra mirada. Por eso Jesús pide a sus discípulos en la Ascensión que no se queden mirando al cielo sino que se comprometan con los problemas de la historia.

Todos podemos utilizar la oportunidad de ver nuestra vida cotidiana con otros ojos, de tomar distancia de nuestros problemas. Utilicemos la oportunidad. Dejémonos llevar por Cristo hacia esa dimensión desde donde podemos ver todo con más claridad.

fray Ricardo de Luis Carballada, orden de predicadores (dominico)


jueves, 2 de junio de 2011

¿QUÉ ES NOTICIA?

DE UN SACERDOTE CATÓLICO AL NEW YORK TIMES
Querido hermano y hermana periodista:

Soy un simple sacerdote católico. Me siento feliz y orgulloso de mi vocación. Hace veinte años que vivo en Angola como misionero. Me da un gran dolor por el profundo mal que personas, que deberían de ser señales del amor de Dios, sean un puñal en la vida de inocentes. No hay palabra que justifique tales actos. No hay duda que la Iglesia no puede estar, sino del lado de los débiles, de los más indefensos. Por lo tanto todas las medidas que sean tomadas para la protección, prevención de la dignidad de los niños será siempre una prioridad absoluta.

Veo en muchos medios de información, sobre todo en vuestro periódico la ampliación del tema en forma morbosa, investigando en detalles la vida de algún sacerdote pedófilo. Así aparece uno de una ciudad de USA, de la década del 70, otro en Australia de los años 80 y así de frente, otros casos recientes… Ciertamente todo condenable! Se ven algunas presentaciones periodísticas ponderadas y equilibradas, otras amplificadas, llenas de preconceptos y hasta odio.

¡Es curiosa la poca noticia y desinterés por miles y miles de sacerdotes que se consumen por millones de niños, por los adolescentes y los más desfavorecidos en los cuatro ángulos del mundo! Pienso que a vuestro medio de información no le interesa que yo haya tenido que transportar, por caminos minados en el año 2002, a muchos niños desnutridos desde Cangumbe a Lwena (Angola), pues ni el gobierno se disponía y las ONG’s no estaban autorizadas; que haya tenido que enterrar decenas de pequeños fallecidos entre los desplazados de guerra y los que han retornado; que le hayamos salvado la vida a miles de personas en México mediante el único puesto médico en 90.000 km2, así como con la distribución de alimentos y semillas; que hayamos dado la oportunidad de educación en estos 10 años y escuelas a más de 110.000 niños...

No es de interés que con otros sacerdotes hayamos tenido que socorrer la crisis humanitaria de cerca de 15.000 personas en los acuartelamientos de la guerrilla, después de su rendición, porque no llegaban los alimentos del Gobierno y la ONU.

No es noticia que un sacerdote de 75 años, el P. Roberto, por las noches recorra las ciudad de Luanda curando a los chicos de la calle, llevándolos a una casa de acogida, para que se desintoxiquen de la gasolina, que alfabeticen cientos de presos; que otros sacerdotes, como P. Stefano, tengan casas de pasaje para los chicos que son golpeados, maltratados y hasta violentados y buscan un refugio.

Tampoco que Fray Maiato con sus 80 años, pase casa por casa confortando los enfermos y desesperados. No es noticia que más de 60.000 de los 400.000 sacerdotes, y religiosos hayan dejado su tierra y su familia para servir a sus hermanos en una leprosería, en hospitales, campos de refugiados, orfanatos para niños acusados de hechiceros o huérfanos de padres que fallecieron con Sida, en escuelas para los más pobres, en centros de formación profesional, en centros de atención a cero positivos… o sobretodo, en parroquias y misiones dando motivaciones a la gente para vivir y amar.

No es noticia que mi amigo, el P. Marcos Aurelio, por salvar a unos jóvenes durante la guerra en Angola, los haya transportado de Kalulo a Dondo y volviendo a su misión haya sido ametrallado en el camino; que el hermano Francisco, con cinco señoras catequistas, por ir a ayudar a las áreas rurales más recónditas hayan muerto en un accidente en la calle; que decenas de misioneros en Angola hayan muerto por falta de socorro sanitario, por una simple malaria; que otros hayan saltado por los aires, a causa de una mina, visitando a su gente. En el cementerio de Kalulo están las tumbas de los primeros sacerdotes que llegaron a la región… Ninguno pasa los 40 años.

No es noticia acompañar la vida de un Sacerdote “normal” en su día a día, en sus dificultades y alegrías consumiendo sin ruido su vida a favor de la comunidad que sirve.

La verdad es que no procuramos ser noticia, sino simplemente llevar la Buena Noticia, esa noticia que sin ruido comenzó en la noche de Pascua. Hace más ruido un árbol que cae que un bosque que crece.

No pretendo hacer una apología de la Iglesia y de los sacerdotes. El sacerdote no es ni un héroe ni un neurótico. Es un simple hombre, que con su humanidad busca seguir a Jesús y servir a sus hermanos. Hay miserias, pobrezas y fragilidades como en cada ser humano; y también belleza y bondad como en cada criatura…

Insistir en forma obsesionada y persecutoria en un tema perdiendo la visión de conjunto crea verdaderamente caricaturas ofensivas del sacerdocio católico en la cual me siento ofendido.

Sólo le pido, amigo periodista, busque la Verdad, el Bien y la Belleza. Eso lo hará noble en su profesión. En Cristo.

P. Martín Lasarte, salesiano.