ORDENACIÓN AL PRESBITERADO DEL
REVDO, D. NOEL ANTONIO DÍAZ
REVDO. D. ALOISY BUSQUETS
REVDO. D. JUAN Mª TELLERÍA
REVDO, D. NOEL ANTONIO DÍAZ
REVDO. D. ALOISY BUSQUETS
REVDO. D. JUAN Mª TELLERÍA
Hoy domingo día 3 de julio, en Madrid, en la Iglesia Catedral del Redentor de la Iglesia Española Reformada Episcopal (Comunión Anglicana) ha sido ordenado presbítero nuestro hermano de la iglesia anglicana de Zaragoza el diácomo Rvdo. Noel A. Diaz, junto a otros dos compañeros
Noel en el Retiro espiritual previo a su ordenación en un monasterio Benedictino en las cercanías de Madrid
Los tres ordenandos junto a su obispo Mons.Carlos López Lozano
Momentos antes de la ceremonia, los tres hasta entonces diáconos
Lo que es para mi (Noel A. Díaz) la ordenación sacerdotal.
Para mi, ser presbítero es estar enamorado... saber que Dios me ha amado primero, ha escrito en mi historia personal, mi nombre con la tinta del compromiso y la vocación.
Para mi, ser presbítero es estar dichoso...con la felicidad que nace de sentirme llevado de la mano de un Dios Padre que a lo largo de mi vida se ha manifestado en llamada, fuerza, entusiasmo, compromiso, abrazo, amor.
Para mi, ser presbítero es sentirme llamado por mi nombre, y al levantar los ojos, contemplar al hermano que necesita del Evangelio para seguir interpretando su propia historia; ver a quien necesita de mi ayuda para seguir teniendo esperanza; trabajar con la comunidad para hacer del Mundo el Reino de Dios de justicia y de paz.
Para mi, ser presbítero es ser pobre entre los pobres, esperanza entre quienes la han perdido y ni siquiera confían en recuperar la luz con quienes viven la noche oscura del alma, Evangelio para quienes han perdido el camino de la vida, brisa para quienes están en el camino del compromiso y huracán para quienes necesitan tomar realidad de su propia conciencia.
Ser presbítero para mi es sentirme solo en el campo de la mies y sin embargo acompañado por el Dueño de la mies que me da fuerzas y me sostiene.
Ser presbítero para mi es sentirme incomprendido y abandonado en la exigencia y el compromiso de la fe y encontrar razones para seguir creyendo, que ni la propia razón entiende.
Ser presbítero para mi es cerrar los ojos y ver el rostro del Dios Vivo y abrirlos y seguir viendo el rostro de ese Dios Vivo en el anciano, en la mujer maltratada, en quien mira con ojos de odio o en quien busca solamente el poder, el dinero o la venganza... abrir los ojos a la Verdad para encontrar el verdadero rostro de Dios.
Ser presbítero para mi es un encuentro, un encuentro con quien todo me ha dado y todo me pide que ponga al servicio de quienes menos tienen. Un encuentro con quien me ha hecho participe de la Luz para iluminar las tinieblas. Un encuentro con el amor hecho Caridad para un mundo que necesita el amor y la ternura de un Dios Vivo.
Ser presbítero para mi es ser emigrante con los emigrantes, erudito con los que mas saben e ignorante con quienes tienen ganas de aprender desde la sencillez y la humildad; llorar con los que lloran, reír con los que ríen, sufrir con los que sufren y trabajar con los que trabajan por un mundo nuevo cuyo horizonte tenga el rostro de Dios...
Pero al final de todo esto, si queréis que comparta con vosotros lo que verdaderamente significa para mi ser presbítero... Me quedo sin palabras. Mejor ven, Miradlo y compartir mi vida...
Y solamente le pido al Dios que todo me ha dado, que podáis contemplar su rostro en mi vid, en mi historia y en mi caminar.
Los tres ordenandos son presentados ante el obispo por el vicario episcopal Rvdo. D. Rafael Arencón
Los tres candidatos son preguntados por el obispo en presencia del clero diocesano, clérigos invitados y fieles asistentes
Imposición de manos sobre Noel
El obispo entrega al ordenando los atributos de el caliz y la biblia
Noel con el cáliz y la biblia que le han sido entregadas por el obispo para que ejerza su nuevo ministerio presbiteral
Los tres nuevos presbíteros ya con la estola sobre los hombros junto con el obispo y los otros celebrante en el Oficio de Santa Comunión
Palabras de D. Victoriano Jimeno Paricio, presbítero de la IERE que acompaña a Noel en la parroquia anglicana de San Andrés de Zaragoza
3-VII-2016....Sin duda este es el dia más importante de tu vida, cuando Dios te señaló con su dedo eligiendote Sacerdote para siempre. Tambien es de grande alegría para cuantos te conocemos muy especial para San Andrés, todos juntos te felicitamos hoy y oramos a Dios para que su ayuda no te falte en los días venideros a lo largo de tu ministerio. Es muy gratificante de tu parte el conocer el significado de ser sacerdote, te deseo vivamente sea el norte de tu pastorado durante el tiempo que Dios te de, tienes toda la razón..... Recibe de mi parte la más cordial felicitación el día de tu Ordenación Sacerdotal,,, ¡Aleluya...!
Foto de familia de los tres nuevos presbíteros y resto de clérigos participantes en la ceremonia junto al obispo diocesano
Foto del grupo llegado a Madrid desde Zaragoza para arropar a Noel Antonio Díaz en el día de su ordenación, Juan M. Fonseca y Eloy J. Torre fueron los reprersentantes de EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO que acompañaron a la delegación de la parroquia anglicana de San Andrés de Zaragoza hasta Madrid
Carta a Noel Antonio Díaz en el día de su ordenación
Amigo y hermano Noel.
Imagino que hoy ha sido un día importantísimo para ti, tal vez el más importante de tu vida después del nacer aunque de eso ya no te acuerdes. Tu ordenación sacerdotal. Después del bautismo creo que es el mayor regalo que te puede hacer el Señor. Él te ha señalado, te ha llamado, te ha bendecido y hoy el Espíritu Santo te ha llenado de Gracia, aunque también es cierto que tu has sabido decir que si a esa llamada, que si a esa vocación, ha sabido decir ese SÍ con mayúsculas tan rotundo, tan importante como dijo una joven María en Nazaret turbada ante un Ángel, o el Sí de Andrés, Simón, Mateo, Santiago, .... cuando los llamó el Maestro.
Amigo y hermano Noel, te deseo todo lo mejor, cuenta con mi sincera oración, recuerda lo que os ha dicho hoy el Obsipo Carlos, con un poquito que pongas de tu parte y el cariño y la misericordia de Dios sabrás ser un buen y santo sacerdote, un buen pastor para este rebaño que tantas veces andamos perdidos.
Gracias Noel por tu generosidad, gracias por tu Sí, hoy sin duda ninguna habrás entonado en tu corazón versos parecidos a los de esta canción:
Te seguiré donde quiera que Tú vayas
y tu Palabra siempre escucharé.
Serás mi luz, mi vida, mi esperanza,
serás el agua viva de mi fe.
Yo creo en ti, en tu sueño de fraternidad
porque el amor el mundo cambiará,
voy a sembrar contigo la felicidad
en casa, en el trabajo, en mi ciudad.
Será Jesús manantial en el camino
y su Palabra el agua de verdad,
será su amor la fuerza y la alegría,
la luz que nuestros pasos guiará.
Y se unirán a nosotros mil amigos,
compartiremos agua, vida y pan
y viviremos juntos como hermanos,
seremos mensajeros de la paz.
Que el Señor te bendiga. Amén
No hay comentarios:
Publicar un comentario