Hoy queremos presentaros un nuevo libro "El Camino del Corazón", 10 días en un monasterio de los hermanos Ernestina y Pedro Álvarez Tejerina.
Os trasladamos lo que nos han dicho de él:
Estimados amigos:
Queremos presentarles el libro: “El Camino del corazón” -10 días en un monasterio-, que la editorial CCS ha publicado en su colección Shalóm, y cuyos autores son: Ernestina Álvarez Tejerina, monja benedictina de Santa María de Carbajal, y su hermano, Pedro. Es su décimo libro.
El texto quiere ser una ayuda para los buscadores que se acercan a los monasterios atraídos por la música callada de sus moradores. A los largo de diez días, diez capítulos, se esbozan pinceladas de lo que es la vida cotidiana en un cenobio benedictino, para proporcionar pistas a los huéspedes de lo que están o pueden llegar a vivir.
Tenemos la suerte de contar en el relato con una doble visión, la del huésped que acude, quizás por primera vez a una hospedería monástica, y la del monje que le acoge y dialoga ampliamente con él.
El protagonista del libro se siente saturado de conceptos, palabras, pensamientos…, quiere parar, empezare a quitar, pero ¿cómo?, ¿dónde? Toma la valiente decisión de ir unos días a un monasterio.
—¿Puedo pasar unos días en la hospedería? – pregunta.
—Por supuesto… -contesta el monje. Nuestra misión es la acogida a los huéspedes como si fueran Cristo peregrino.
Para muchos será difícil entender esta aventura. ¿Qué vas a hacer allí tú solo? ¿Tan mal te encuentras? ¿No sería mejor que fueras a la playa, un SPA, o a un macro concierto…?
Lo que sucede al seguir la jornada monástica durante unos días es difícil de explicar, hay que vivirlo. No obstante, los autores quieren anticipar algún olor, color, sabor, de ella. Una advertencia, es una experiencia paradójica: se asciende bajando, menos es más y la meta es la simplicidad.
Durante la estancia se puede pasar por diferentes estados, se suele llegar estresado, angustiado, y se termina, experimentando cierta unificación en torno al ser. Las vivencias más frecuentes y por las que los autores ayudan a transitar son muy variadas: la lectio divina y la liturgia, otras formas de conocer además de la racional, la meditación y la contemplación, la importancia de la atención, la consciencia, otras dimensiones del tiempo, el trabajo, la energía, la trasformación integral de la persona...
La estancia temporal en los monasterios tendría que ser más frecuente en la vida de los cristianos. Monjes y laicos juntos bajo la sombra de protección de la espiritualidad benedictina, viviendo el “arquetipo monástico”, la búsqueda de lo esencial y la simplicidad, que todo ser humano poseemos.
La Iglesia declara que la experiencia monástica es puente para el encuentro de las religiones. En la medida en que nuestra búsqueda es más radical, es más sencillo el compartir experiencias con los auténticos buscadores de las otras tradiciones. Por ello los autores han introducido textos y experiencias de grandes santos de otras religiones. “Tanto más lejos podemos llegar cuanto más honda sea nuestra experiencia de Dios”.
Lo que sucede al seguir la jornada monástica durante unos días es difícil de explicar. Hay que vivirlo. No obstante, después de repetir varias veces esta experiencia, me propongo abrir una pequeña hendidura en los sólidos muros de la vida cotidiana de un monasterio para que juntos podamos asomarnos a ella. ¡Mirad, asomaos! Para avanzar por el estrecho pasadizo que hemos abierto necesitamos realizar un proceso de «decrecimiento» cuya meta es la simplicidad. Esta transformación se inicia con una gran paradoja, para «quitar» comenzamos «añadiendo»: reflexión, profundidad, estudio… Desde aquí puedo oír vuestras quejas ¿acaso son necesarias más palabras, ideas, para parar? La respuesta la podemos encontrar en el diálogo de un antiguo maestro con su discípulo.
Presentación.
1. El sendero que conduce a la verdad (Primer día).
2. La novedad de la lectio divina (Segundo día).
3. Otras formas de pensar son posibles (Tercer día).
4. La alegría de la liturgia (Cuarto día).
5. La sabiduría de la atención (Quinto día).
6. El trabajo no engaña (Sexto día).
7. El estrés y la angustia tienen marcha atrás (Séptimo día).
8. El tiempo no pasa (Octavo día).
9. La transformación litúrgica (Noveno día).
10. La despedida o el comienzo de algo nuevo (Decimo día).
Anexos
Información sobre los autores
Información sobre los autores
Ernestina Álvarez, monja benedictina del monasterio de Santa María de Carbajal de León, es doctora en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid y licenciada en Ciencias Religiosas por la Universidad Pontificia de Salamanca.
Pedro Álvarez, licenciado en Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid, desarrolla su actividad profesional como funcionario.
Ambos son miembros de la Comisión Ibé- rica del Diálogo Interreligioso Monástico (DIM) que agrupa a creyentes de diversas confesiones y tradiciones religiosas, y presta especial atención a los diferentes modos de vida monástica y contemplativa.
Más información:
Estupenda propuesta para este verano. Dios es una esfera infinita cuyo centro se encuentra en todas las cosas y su circunferencia en ninguna. Un abrazo.
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