Nuestros hermanos de la Comunidad Ecuménica Cristiana Joan Masvidal nos han remitido su boletín correspondiente al periodo: marzo - abril 2018, boletín nº 19/ 042018 que os reproducimos:
BOLETÍN CEC-MASVIDAL
Viaje a Latinoamérica
Como ya te habíamos informado, nuestro misionero inició una expedición de casi dos meses por Sudamérica, en la que visitó contactos en Uruguay, Argentina y Chile. En su conjunto nos ha permitido formular y ejecutar una serie de proyectos que marcarán las líneas de crecimiento y futuro de la CEC Masvidal en los próximos años.
1º proyecto:
La CEC-Masvidal ha firmado un convenio con la Iglesia Metodista Unida de los Estados Unidos (Disciplineship Ministries of The United Metodist Church), para hacer realidad en los Países Catalanes la edición y distribución del famoso e histórico devocional The Upper Room / El Aposento Alto, por primera vez en lengua catalana.
Como es sabido, se trata de un devocional diario con más de 80 años de historia, interdenominacional, de gran calidad y penetración, y con una presencia mundial que supera los 100 países y los 30 idiomas. Bajo el nombre de 'El Cenacle', esta versión catalana incorporará –a parte de la edición clásica en papel– ediciones online para los principales dispositivos digitales. El primer número que verá la luz será el que corresponde al primer bimestre de 2019. En pocos días ya podrás hacer tu reserva y encontrar toda la información en:
Agradecemos a Dios que nos haya permitido iniciar este ministerio tan especial.
2º proyecto:
Nuestra entidad ha establecido convenios de colaboración con diversos centros de todo el mundo para ofrecer a todo el que se sienta llamado, la posibilidad de hacer voluntariado internacional.
Con en nombre de NET.Masvidal, iniciamos una agencia misionera que quiere ser un puente seguro entre personas y destinos mundiales dedicados a la obra social, desde la fe en Cristo. Confiamos que éste puede ser también un buen instrumento por el que nuestras iglesias locales puedan acceder a tener una extensión misionera y promover entre los jóvenes la experiencia increíble de amar a Dios a través de los más desfavorecidos, con voluntariados de entre uno a tres meses. Estas experiencias retornan a las iglesias y a nuestra sociedad personas transformadas y motores de cambio. Nos ponemos en marcha con 12 destinos, en 9 países, de 3 continentes.
Visita la web: http://netmasvidal.org
3º proyecto:
La CEC-Masvidal está perfilando una alianza estratégica que permitiría convertirse en centro logístico de acogida de misioneros de otras agencias internacionales, en su paso por el tránsito intercontinental. Éste había sido un proyecto perseguido por nuestra entidad desde hace meses. Te pedimos oración para que en el próximo boletín te podamos confirmar que se ha llegado a buen puerto.
Con motivo del pasado
Día Internacional de la Mujer.
Desde la CEC-Masvidal luchamos
por no aceptar actitudes patriarcales
que impiden a la mujer llegar a
los mismos cargos y ministerios
eclesiales que el hombre. Y esto
vale para todas las denominaciones
cristianas. El ecumenismo no
puede ser nunca una excusa para
taparse las vergüenzas bajo la bandera
del respeto mutuo, porque
ser misógino atenta contra derechos
fundamentales
Otras noticias
Renovación de webs
Durante los meses de febrero y marzo, la CEC-Masvidal ha estado realizando una renovación de la
imagen de sus webs. Te invitamos a que las visites, y nos aportes ideas:
- Web principal de la CEC-Masvidal: http://cecmasvidal.org
- Web del Seminario Teológico Ecuménico: http://setecmasvidal.org
- Portal educativo del SETEC-Masvidal: http://plataforma.setecmasvidal.org
- Creación de la web de la NET.Masvidal: http://netmasvidal.org
- Preparación de la web de El Cenacle: http://www.elcenacle.org
Semana Santa y retiros en la Ajadía
En la Ajadía de Biescas pudimos celebrar unos días especiales de liturgia y recogimiento durante las solemnidades de Semana Santa. Fue significativa la participación de Jueves Santo en el marco de una merienda-cena en el jardín de la Ajadía, como hilo conductor de la celebración del Culto y del lavado de pies, con la presencia de personas de hasta 5 nacionalidades diferentes, y en donde -de modo anecdótico- se oyó el Padrenuestro en 5 lenguas diferentes por parte de los asistentes. Por otro lado, te recordamos que puedes reservar la realización de retiros espirituales de fin de semana en nuestra casa en el Pirineo: puedes comprobar la disponibilidad en
“Sólo un nombre en tal lugar”
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María Soledad Olivero,
Misionera de ProVisión
Santiago de Chile (Chile)
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Hace algunos años atrás, fui a Bolondo a buscar en medio de la alta hierba del patio de una vieja iglesia Presbiteriana, la tumba de los primeros misioneros que llegaron a Guinea Ecuatorial. De esas tumbas quedaban sólo algunos vestigios y quizás algo de las cruces donde estaban escritos sus nombres con poca legibilidad. Hoy pienso en mis amigos misioneros, algunos con grandes ministerios, otros luchando para aprender el idioma, entender la cultura y tratando de buscar la forma de presentar el evangelio de una manera contextualizada, para que aquellos donde sirven lo puedan entender. Así como aquellos vestigios de Bolondo, olvidados en el tiempo y con ellos también la obra apasionada y sin reserva de aquellos misioneros de antaño, en la actualidad escribimos en nuestros corazones con tinta deleble a nuestros misioneros. Cuando pasaron por nuestras iglesias, les dijimos: “desde acá les apoyaremos”, pero pasaron los días y el compromiso se desvaneció. ¿Cuánto cuesta una llamada? ¿Cuánto tiempo me lleva una oración en su favor? ¿Me faltará si les envío una ofrenda? Dejar que en la vida de nuestras iglesias nuestros misioneros se conviertan en “sólo un nombre en tal lugar” no es justo para ellos, pues detrás de ese nombre siempre habrá personas, familias, amigos y hermanos nuestros que no sólo dejaron su país, sino también depusieron sus intereses (casas, profesión, trabajo) enfrentando cada día nuevos desafíos en la nación, etnia o tribu donde Dios les llevó a servir. Además, la tarea misionera siempre será tan amplia, profunda y coherente como las necesidades y exigencias de la vida humana y detrás de esa amplia, profunda y coherente labor a la que llamamos misión, el “tal lugar” se va a traducir en un paso de fe y en un estar en medio de nómadas, refugiados, bloques religiosos, servicio en hogares de niños, mujeres, ancianos, traducción bíblica, alfabetización, salud, negocios, educación, evangelismo relacional, discipulado y plantación de iglesias. Estos hombres y mujeres están expuestos en el campo donde sirven, a enfermedades, persecución, soledades, desánimo y frustración. Han ganado batallas, en otras han salido heridos y nos han necesitado, como cuando a nosotros nos pasó algo, pero aquí, y nos rodearon los que nos amaban, animándonos a seguir. Por qué no ponernos en su lugar, por qué no averiguar quiénes son realmente, dónde están, qué necesitan, qué necesidades puntuales de oración tienen, planear una visita aunque estén lejos. Ese misionero te lo agradecerá.
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