Todos juntos
Un espacio propuesto por EQUIPO ECUMÉNICO SABIÑÁNIGO

viernes, 3 de noviembre de 2017

BOLETÍN CEC-MASVIDAL SEPTIEMBRE-OCTUBRE. 2017

Nuestros hermanos de la Comunidad Ecuménica Cristiana Jaume Masvidal nos han remitido su boletín nº 16 correspondiente a Septiembre y Octubre de 2017, os lo reproducimos.



Nuestras novedades 

Estado del comedor social de Guinea Ecuatorial 

Estado de cuentas-. A fecha de hoy y gracias a vuestra generosidad, hemos recogido el 50% del presupuesto, y estamos dentro del calendario previsto. Os presentaremos las cuentas al acabar el trimestre. Seguimos trabajando para conseguir el objetivo marcado con campañas de email, venta de productos solidarios en tiendas, conferencias y presentaciones públicas, solicitudes de apoyo de empresas, etc. También hemos hecho dos vídeos para difundir este proyecto, y tenemos cuenta bancaria abierta para recibir las aportaciones.
Importante: ¡te animamos a que nos ayudes a organizar una presentación en tu entorno!

En la prensa


Activismo comprometido

¡¡¡ Queremos implicar a todas las partes!!! 

Hemos gestionado con la 'Fundación Hermanos Martínez', ubicada en la isla Lazarote y asociada a la red más grande de distribución alimenticia existente en Guinea Ecuatorial, para que esta cadena se comprometa a hacer aportaciones de alimentos al comedor social de Bata. ¡Pronto os confirmaremos este dato! 


Actos del Vº centenario de la Reforma



La CEC-Masvidal fue invitada el pasado 28 de octubre a participar de la Celebración Ecuménica de la Reforma, compartiendo culto con diferentes denominaciones protestantes, y la católica con la presencia destacada de su prelado el obispo D. Julián.

Celebración ecuménica en Sabiñánigo

Celebración con la Iglesia Anglicana (IERE) 

Así mismo, los actos de la conmemoración de la Reforma nos permitieron disfrutar también de la invitación de la Iglesia Anglicana en Zaragoza, para participar en la oración conjunta entre católicos y protestantes del día 31 de octubre.
Oración conjunta en Zaragoza

ECUMENISMO DE BASE

Erika Aguerri
Cristianos Monrepós
Biescas (España)
Los que hoy nos reunimos en el centro parroquial hemos tenido que vencer la tentación de quedarnos en nuestras casas calentitos y cómodos, de quedarnos con los amigos o simplemente la idea de coger el coche y desplazarnos de un pueblo a otro para poder llegar a tiempo. 

Conforme vamos entrando saludamos con alegría a los conocidos y con un poco más de timidez a los que no lo son tanto, siempre es una alegría ver caras nuevas. Y mientras se acerca la hora tomamos asiento y comenzamos la reunión del equipo ecuménico con una oración, pidiendo al Espíritu que nos guíe y acompañe. 

Mientras la reunión sigue su curso me pierdo en mis pensamientos. Hace apenas dos años no sabía nada del Ecumenismo ni de que era, cuando mi pastor me invitó a que lo acompañase a una reunión me sentí un poco confusa; hoy en día me parece algo fundamental en la vida de cualquier cristiano. Cuando veo a las personas que están aquí reunidas: anglicanos, protestantes, ortodoxos, católicos… con un único fin, que es buscar la unidad entre todos nosotros, esforzarnos por buscar los puntos en común de nuestras distintas denominaciones y tener muy claro que todo se hace por y para Dios, no puedo por menos desear que esto fuera la normalidad de la Iglesia de Cristo. 

Como miembros de la Iglesia Universal de Cristo, como discípulos suyos tendríamos que estar más preocupados en comprender el mensaje que el Maestro nos legó. Deberíamos centrarnos en la ayuda al desfavorecido, al que sufre, al que ha sido repudiado por la sociedad. Deberíamos trabajar codo con codo, como distintos miembros de un mismo cuerpo y bajo una única dirección, tal y como Pablo nos dejó en la 1ª carta a los Corintios 12:12 “Porque como así como el cuerpo es uno, y tiene muchos miembros, pero todos los miembros del cuerpo, aunque son muchos, constituyen un solo cuerpo, así también es Cristo(RV 1960). En lugar de esto, muchas veces nos encontramos con iglesias preocupadas en llenar bancos, en recaudar diezmos, en dictar normas de conducta, en mantener una posición cómoda y en hacer enemigos al que no piensa como ellos. 

Cristo vino a salvarnos a todos, a amarnos a todos y a perdonarnos a todos. En su día a día estuvo rodeado de gente humilde y muchas veces fue un revolucionario, no se acomodó en un edificio y se limitó a leer una y otra vez un libro, salió a la calle, escuchó a la gente, consoló, rio y lloró con ellos. A veces se enfadó y se desesperó y otras fue dócil. Pero lo que nunca hizo fue alejarse de Dios, de su Padre y de cumplir Su voluntad. 

Dentro del equipo ecuménico, veo esa vuelta a la sencillez del servicio a Dios, esa unidad en la fe y en la confianza en Dios. Los que nos reunimos hemos sido capaces de aprender a ver al prójimo como un hermano, de saber que aunque hay cosas en las que no vamos a poder estar de acuerdo, vamos a trabajar juntos por llevar el mensaje de Cristo a cada rincón de la tierra para que todos puedan sentir el gozo y la paz de ser hijos de Dios, vamos a enseñarles que cuando alzamos nuestras voces y oramos con las palabras que Jesús nos enseñó, todos -independientemente de dónde nos congreguemos- creemos y afirmamos que Dios es nuestro Padre, que todos somos hermanos y que queremos hacer su voluntad. 

El ecumenismo no ha nacido para llenar bancos en edificios, ha nacido para acercar las almas a Dios.





1 comentario:

  1. Que escrito más bonito el de Erika.
    Lo comparto totalmente, gracias Erika.
    Eloy

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